Y se le hizo la luz para Brunilda.

En medio de la emergencia tras el apagón la batería del grillete que lleva en su tobillo Brunilda Rodríguez Ramos comenzó a agotarse.

Al mismo tiempo los nervios se apoderaron de ella porque el sistema que salió de su fase comenzó a dar avisos de que se había salido del perímetro establecido por el programa de supervisión electrónica de la Oficina de Servicios con Antelación a Juicio (OSAJ).

A la mujer se le iluminó la vida cuando esta mañana recibió una llamada de un oficial de la agencia verificando si estaba en el hogar de su hermana quien le dio refugio e indicándole que pasara al Cuartel General de la Policía para que pudiera cargar el grillete que desde junio la confinó en un estrecho apartamento.

Relacionadas

“Estuve desde ayer (miércoles) desconectada. El grillete habla y me dice que estoy fuera de cobertura pero es que no hay señal. No pude llamar ayer a los de OSAJ porque no había comunicación. Yo estaba asustada porque pensé que me vienen a buscar a ingresarme pero se solucionó” expresó con candidez.

Mientras se encontraba sentada en los bancos de madera y se miraba la batería que estaba cargando la cual cubría con un paño rojo del cual se extendía un cable hasta el receptáculo que está justo detrás de la máquina del café.

Recordó que un teniente del programa le dio instrucciones que saliera inmediatamente del residencial Nemesio R. Canales, aledaño al Cuartel General para que lo cargara.

Por más de dos horas se mantuvo sentada, ya más calmada en el solitario sector porque quería asegurarse de tener suficiente carga para no volver a pasar otro sobresalto similar.

“Me asusté mucho porque pueden venir a arrestar a uno a pensar de que uno se aprovechó que no había luz para salir a la calle, para hacer muchas cosas. Yo me mantuve en mi casa asustada, pero que estaba yo a la expectativa, no quería que nadie cogiera el teléfono para cuando ellos llamaran supieran que yo estaba ahí”, expresó la mujer.

La mujer, que solo puede salir al balcón del apartamento, fue acusada por el delito de violencia de género y violación a una orden de protección y espera salir la próxima semana airosa del problema ya que le ofrecieron acogerse a un programa de manejo de coraje.

Es la primera vez que estoy en estas cosas pero eso es pa’to el mundo porque a veces los esposos se ponen…porque él fue el que hizo todo pero yo no lo denuncié y él me acusó a mí”, dijo sin tapujos Rodríguez Ramos. La mujer durante este período aprendió que en ocasiones hay que romper el ciclo de maltrato.

El resto de las oficinas del Cuartel General se encuentran a oscuras en su mayoría pero de todos modos los empleados acudieron a laborar o a intentar realizar las labores con las limitaciones de la falta de energía eléctrica. Algunos se enteraron de que el Gobernador indicó que la hora de entrada era al mediodía cuando llegaron a las 8:00 a.m. al edificio.

El área donde se expiden los Certificados de Antecedentes Penales, que es la más visitada en el Cuartel General, por su puesto, está desierta, pero siempre acuden personas a entregar documentos para licencias y otros trámites los cuales se realizan desde tempranas horas de la mañana.

En la comandancia de Área de San Juan es mínimo el personal ya que la mayoría, incluyendo a los altos oficiales se encuentran ofreciendo patrullaje preventivo.

Por ratos se observa alguna tertulia sobre sus preocupaciones ante la emergencia y luego regresan a sus áreas de trabajo.