Montan rompecabezas en caso de asesinato de la fiscal
Investigan secuencia de delitos en pueblos del área este.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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Los investigadores del equipo especial constituido para investigar el crimen de la fiscal Francelis Ortiz Pagán, evalúan en detalle la secuencia de delitos de índole violenta cometidos en Río Grande y municipios adyacentes en busca de pistas que los conduzcan a los sospechosos.
A Ortiz Pagán, de 42 años, desconocidos le dispararon en el rostro y un costado cuando se disponía a entrar en su auto por el portón de su residencia localizada en el barrio Guzmán Arriba en Río Grande, el 19 de enero, poco antes de la 1:00 a.m. en lo que se teoriza pudo haber sido un intento de asalto a mano armada para despojarla de su vehículo o de un robo domiciliario.
Desde el inicio de la pesquisa las autoridades han estado tras la pista de un auto compacto color blanco cuya descripción concuerda con la ofrecida por otros querellantes de asaltos y robos domiciliarios en esa zona.
Según conoció este medio a través de fuentes policiacas, la pesquisa abarca los municipios de Juncos, Gurabo, Las Piedras, San Lorenzo, Caguas, Naguabo hasta Trujillo Alto, los cuales se conectan a través de carreteras secundarias, según fuentes allegadas a la investigación.
De acuerdo a fuentes con conocimiento de la pesquisa, uno de los casos que se encuentran bajo pesquisa se reportó durante la madrugada del asesinato de la fiscal, concretamente a las 3:00 a.m., luego de que un hombre con una herida bala fue transportado en un automóvil color blanco hasta el Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) de Juncos y luego su conductor se marchara del lugar.
El herido, que recibió un balazo en el muslo izquierdo, fue identificado como un joven de 20 años, vecino San Lorenzo, quien alegó que le dispararon mientras caminaba con un amigo por la carretera PR-9913 en Juncos. La versión que se intenta corroborar es si la balacera ocurrió en un residencial del mencionado municipio y si iba acompañado con posibles sospechosos del asesinato de la fiscal.
Otro suceso que se investiga por la Policía es el hurto de un automóvil marca Ford Fiesta, del año 2011, color gris, reportado el 20 de enero a las 12:29 a.m. en la carretera PR-171 en la calle Saturno en Cayey. Los ladrones llegaron al lugar en una camioneta marca Ford F-150, también color blanca, la cual pudo haber sido hurtada el día anterior en el sector Los Mangó, de Juncos.
El 24 de enero, los ocupantes de este vehículo hurtado sufrieron un accidente a las 4:06 a.m. en la carretera PR-183, cerca de la entrada a la urbanización San Cristóbal de Las Piedras, donde se estrellaron contra un poste del tendido eléctrico de cemento.
El pasajero, de 20 años y residente del sector Asomante en el barrio Tejas de Las Piedras, sufrió heridas de cuidado. El chofer escapó.
El caso fue consultado con el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), pero la agencia no asumió jurisdicción de la pesquisa. La entrevista a este sujeto pudiera aportar información importante a la investigación, agregó la fuente policíaca.
Como parte del desarrollo de la pesquisa durante la tarde de este martes, agentes adscritos a la División de Inteligencia del área de Caguas capturaron a Elvin Mejías Cáceres, de 21 años, contra quien pesaba una orden de arresto por el delito de carjacking.
Los hechos que se le imputan ocurrieron durante la noche del 19 de enero, en la carretera PR-1, del barrio Beatriz frente a una escuela en Caguas, donde interceptó a una mujer y bajo amenaza con un arma de fuego la despojó de un vehículo marca Toyota Yaris, color marrón, del año 2015.
El 20 de enero, los agentes ocuparon el automóvil en el barrio Collores de Las Piedras donde se arrestó a un joven de 18 años, mientras que Mejías Cáceres se dio a la fuga.
En este caso, la fiscal Elizabeth Casado instruyó a no radicarle los cargos al muchacho, pero sí a Mejías Cáceres, en ausencia, por la posesión de un vehículo hurtado.
La jueza María del Rosario Rojas, del Tribunal de Humacao, la cual expidió la orden de arresto con una fianza de $100,000. El individuo fue ingresado en el Complejo Correccional de Bayamón.
Hasta el momento las autoridades han indicado que el individuo no ha sido vinculado con el caso, pero la investigación continúa.