El lanzador de los Nacionales de Washington, Liván Hernández, dijo que en su momento dará su versión de la historia sobre su alegada relación con Ángel Ayala Vázquez, mejor conocido como Ángelo Millones, convicto federal por narcotráfico y lavado de dinero.

El pelotero cubano está en la mirilla de las autoridades federales desde que fue mencionado en el caso contra Ayala Vázquez. Fue descrito por la fiscalía federal como un testaferro del narcotraficante y podría ser investigado por la Administración de Drogas y Narcóticos (DEA).

Hasta el momento, Hernández se había mantenido al margen de la discusión, inmerso en su participación como as de los Nacionales en el béisbol de las Grandes Ligas. Sin embargo, todo cambió cuando la fiscalía federal en Puerto Rico dijo que la administración de Major League Baseball (MLB) solicitó una reunión una reunión en las próximas semanas para conocer en detalle las alegaciones en contra de Hernández.

Así llegó la información a la prensa estadounidense que abordó a Hernández antes del partido del pasado miércoles contra los Mets de Nueva York.

“No hay nada interesante que decir”, dijo Hernández en español, cuando se le pidió un comentario, según publicó The Washington Post. “Cuando haya algo interesante, les diré”.

Hernández no quiso elaborar cuando se le preguntó si tenía un representante legal que pudiera hablar por él y si conocía a Ayala Vázquez.

“En su momento, daré mi parte de la historia, sin problema”, dijo Hernández, en su acostumbrada personalidad de minimizar las controversias y con tranquilidad intercambiaba risas con el campocorto dominicano de los Mets, José Reyes.

John Dever, director de comunicaciones de los Nacionales de Washington, dijo que la administración de la novena no ha conversado sobre el tema con Hernández, quien no ha sido acusado.

“No hemos tenido comentario de Liván”, indicó Dever hoy a Primera Hora.

En cuanto a la gerencia de los Nacionales, Dever se reiteró en las declaraciones que han suministrado a la prensa. “Los Nacionales  están al tanto y continúan monitoreando la situación en lo que respecta al caso de Ángel Manuel Ayala”.

Durante el juicio, se reveló que dos carros deportivos de Angelo Millones, un Porsche y un Lamborghini, estaban bajo el nombre del pelotero de Grandes Ligas. De la misma manera, un almacén de Ayala Vázquez, que contaba con un estudio de grabación, una barbería, un taller de mecánica y oficinas ejecutivas, era propiedad de Hernández, lanzador de los Nacionales de Washington.