Sobrevivió la Masacre de La Tómbola. Salvó un niño cuando comenzaron escucharse los disparos. Le dijo que corriera y lo llevó a un lugar seguro.

Pero su acto de heroísmo se eclipsó por todo el horror, el llanto y las vidas perdidas. 

Ahora, las lágrimas devoran su rostro al recordar la pérdida de una criatura que estaba a unos días de nacer cuando murió en el atentado registrado el 17 de octubre de 2009. 

El crimen de La Tómbola dejó el saldo de ocho muertos, la muerte del feto de ocho meses de gestación, cuya madre sobrevivió, y 20 heridos de bala. 

Janet Maysonet Negrón, de 41 años de edad, se encontraba con la madre que perdió el bebé cuando ocurrió el atentado. De hecho, es la tía política y la comadre de Carmen María García Santiago, la mujer que había testificado sobre la bala que atravesó su glúteo y llegó a alojarse en la cabecita de su criatura, Daneyshka Ríos García. El Estado no permitió la inscripción de su nombre al haber muerto antes de nacer.

“Esto ha sido un proceso bien doloroso para todos. No es fácil. Ver a un ser querido, que Dios te lo dio con todas sus partes y ver como es destrozado de esta manera en la masacre”, indicó Maysonet Negrón. 

La sobreviviente de la masacre ha seguido el proceso de cerca. Testificó en el caso, como han reseñado otros medios de comunicación que han presentado su fotografía y declaraciones, y hoy, sábado, volvió a acudir al Tribunal Federal para esperar el veredicto del jurado.  

La mujer presenció los argumentos finales de las partes el pasado viernes que incluyó una presentación de la Fiscalía Federal en que se mostraron fotos de las víctimas, incluyendo la criatura con el devastador impacto de bala en la cabeza.

“No creo en la pena de muerte, pero al ver las fotos presentadas ayer, no solamente del bebé sino de todas las demás personas, fue algo bien impactante”.

¿Ahora favorece la pena de muerte?

"Me hubiese gustado que esas personas que están en contra de la pena, por religión o por cualquier otra razón, hubiesen tenido la oportunidad de estar en sala y ver con sus propios ojos como él macheteó a un ser humano para convertirlo en papilla”, indicó. 

La mujer, que conoció al acusado desde pequeño, asegura que el coraje que sintió con el atentado no ha menguado.

“Tengo coraje porque ahora es Alexis que tiene derechos cuando él violó los derechos de todas las demás personas”, subrayó.