Los miembros del jurado en el juicio contra el exboxeador Félix Verdejo observaron en detalle las imágenes del cuerpo de Keishla Rodríguez Ortiz cuando fue entregado al Instituto de Ciencias Forenses.

En el sexto día del juicio que se lleva a cabo en el Tribunal Federal para el Distrito de Puerto Rico, la patóloga forense Rosa Rodríguez Castillo describió este martes las explícitas fotos tomadas durante la autopsia que se le realizó a la víctima el 1 de mayo de 2021, el cual presentaba múltiples traumas en el rosto, además de que comenzaba el proceso de descomposición.

El Ministerio Público presentó las crudas fotos del cuerpo, que ya había comenzado a descomponerse por el tiempo que estuvo sumergido en el agua de la Laguna San José.

La mujer fue reportada desaparecida el 29 de abril y encontrada el 1 de mayo de 2021.

La tez de Keishla exhibía tonos marrones, zonas amarrillas y moradas, así como la cara deforme, la piel de las manos y el cabello comenzaban a desprenderse. Rodríguez Castillo describió que Keishla estaba vestida con un ‘scrub’ azul royal, una camisa con diseños de nubes y animales, así como pantalón liso, tenis marrón, medias azul turquesa y mostaza y un sostén negro de botones.

Además, la patóloga explicó que la víctima sufrió múltiples traumas en el rostro antes de ser lanzada a la laguna.

“Tenía una abrasión en el cuello, más prominente en la parte posterior a nivel superior, un edema y una distorsión del área. Tenía una contusión en el cachete izquierdo y dos contusiones en el área mandibular. Una contusión sobre la oreja derecha, otra en el pómulo derecho y en el área mandibular derecha. En la parte superior de la nariz, se evidencia una fractura del tabique nasal, en este caso una desviación de izquierda a derecha”, sostuvo en sala.

Asimismo, atestiguó que Keishla Rodríguez estaba amarrada con un alambre desde el cuello hacia la zona abdominal y las manos hasta los tobillos, atada a un bloque de cemento. Eso imposibilitó su capacidad para nadar.

Rodríguez Castillo confirmó, además, que la víctima estaba viva cuando fue lanzada a la Laguna San José, donde su cuerpo semisumergido fue recuperado por las autoridades entre los mangles.

“En este caso en particular, se encontró agua en el seno esfeniodal, compatible con una persona que estaba respirando cuando es lanzada al agua”, dijo a preguntas de la fiscal Jeanette Collazo.

La patóloga forense dijo en sala que durante los exámenes detectaron una combinación de xilazina y fentanilo, dos sustancias que, combinadas, limitaría las capacidades de movimientos de una persona. Keishla tenía ambas en el sistema. Rodríguez Castillo aclaró que, durante la autopsia no fue posible encontrar el lugar donde fue inyectada con las sustancias.

“El fentanilo tiene usos médicos e ilegales. El médico es como analgésico para el dolor en pacientes de cáncer. En el uso ilegal, se puede presentar de manera inyectable y en forma de polvo. Las pueden preparar simulando pastillas similares a las recetadas. Los efectos del fentanilo son producir una disminución en la respiración, confusión e inconciencia. La xilazina, que estaba presente en este caso, no es un medicamento comercial. Es un analgésico para usos veterinarios en caballos”, explicó.

También compartió que, durante la autopsia, se concluyó que la víctima estaba embarazada.

“Se encontró un producto gestional. Durante el proceso, debido al adelantado estado de descomposición, había que preservar ese material para su análisis pertinente. Solicitamos las herramientas necesarias para preservar ese producto. De ahí se tomaron las medidas y se preservó para el análisis de ADN”, indicó.

Al momento no se ha especificado si esa prueba de ADN se llevó a cabo.

“Partiendo de la premisa del estado de descomposición, era un embrión de tres a seis semanas aproximadamente”, agregó Rodríguez.

El juez Delgado Hernández cerró la sesión antes de que la defensa iniciara el contrainterrogatorio de la testigo. El juicio continuará el miércoles a las 9:00 a.m.