Justicia vuelve a ver la evidencia en caso del niño Lorenzo
Es vista por fiscales e investigadores no vinculados antes al caso
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 años.
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La muerte de Lorenzo Ahmed González Cacho, de 8 años, no es caso cerrado en el Departamento de Justicia porque hay mucha prueba que se quedó sin desfilar ante el tribunal.
Este caso se ventiló en dos ocasiones en el 2016, cuando se determinó que no existía causa para juicio contra Luis Gustavo Rivera Seijo, alias El Manco, porque la evidencia desfilada impugnaba sus confesiones.
Por ello Justicia reactivó el análisis de los expedientes con fiscales que no tuvieron contacto con la pesquisa e investigadores de la agencia, excluyendo al Negociado de la Policía que repasa los resultados de pruebas científicas que no tenían disponibles antes, con peritos del Negociado de Ciencias Forenses y han iniciado entrevistas a testigos que declararon durante todas las etapas de la pesquisa.
La secretaria de Justicia, Wanda Vázquez Garced, quien para el momento de la muerte del niño era la directora de la fiscalía de Bayamón, aceptó en enero del año pasado que comenzaron a revisar los expedientes del caso.
Sin embargo, en ese momento afirmó que no se había encontrado evidencia suficiente para reabrirlo y someter cargos, aunque dos meses después indicó públicamente que no preveía reactivar el caso.
Por el contrario, ahora en junio reveló que continúan repasando la prueba con el objetivo de esclarecer el asesinato que mantiene en vilo al País.
Según este caso, el 9 de marzo de 2010, Lorenzo fue llevado por su madre Ana Cacho al Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) de Dorado, donde fue declarado muerto.
Cacho dijo en ese entonces que su hija menor la despertó a gritos diciéndole que Lorenzo la había mojado con sangre, por lo que ella infirió que su hijo se había caído de la cama.
No obstante, la autopsia del patólogo Carlos Chávez reveló que el pequeñín falleció de un severo trauma cráneo cerebral, provocado por un golpe en la cabeza y tres heridas de arma blanca, en la sien izquierda, sobre la nariz y encima de un párpado.
El 15 de marzo de 2010, la fiscal Wanda Casiano le hizo a Cacho las advertencias de ley declarándola como sospechosa, pero nunca le presentaron cargos, aunque sí fue citada a declarar en este caso.
“Estamos repasando todo el expediente desde el principio y discutiendo con el Negociado de Ciencias Forenses los hallazgos para vislumbrar la posibilidad de esclarecer el caso. Mientras no haya responsable y se haga justicia, trabajaremos en el mismo”, declaró por escrito ayer Vázquez Garced.