El notorio narcotraficante José Figueroa Agosto, de 46 años, podría enfrentar una pena máxima 25 años de cárcel  en el foro federal si se puede probar que adelantó su empresa criminal de tráfico de drogas mediante un pasaporte que obtuvo con información fraudulenta.

Figueroa Agosto se declaró culpable durante una vista celebrada ayer ante el juez José A. Fusté  de dos cargos federales relacionados con el pasaporte que utilizó para fugarse del país luego de evadir la antigua Penitenciaría Estatal de Río Piedras, Oso Blanco, en el 1999, a través de una orden de excarcelación fatula.

El hampón admitió que una ex empleada de uno de sus ex abogados lo asistió en la radicación del documento y que, incluso, proveyó su dirección física para el envío del mismo. Yesenia Vázquez Torres, la ex empleada que ahora es abogada,  ya se había declarado culpable de haber asistido a Figueroa Agosto en el trámite, y fue sentenciada a trabajo comunitario.

Pero durante la vista, que se limitó a la declaración de culpabilidad de Figueroa Agosto, el juez Fusté advirtió que la sentencia podría fluctuar entre 10 y 25 años de cárcel en el foro federal si se determina que el documento facilitó  el contrabando de estupefacientes.

“Sí, sí, señor”, indicaba Figueroa Agosto mientras que el juez Fusté le formulaba preguntas relacionadas con su declaración de culpabilidad.

 Aunque las guías del código penal federal establecen que la sentencia podría fluctuar entre 8 a 14 meses mediante una declaración de culpabilidad, el juez subrayó que debería sopesar varios elementos del historial criminal de Figueroa Agosto antes de asignar su sentencia.

La vista se podrá programar una vez se emita el informe sociopenal del sujeto, el cual podría ser entregado a la corte durante los próximos 60 a 90 días.

A la sala acudieron más de una decena de familiares de Figueroa Agosto, quien cumplía una sentencia de 209 años de cárcel por el asesinato del puertorriqueño, Arnaldo Martínez, alias “Nandy el Gruero”. Según el Ministerio Público puertorriqueño, el sicario había torturado y asesinado al sujeto por un supuesto alijo de cocaína de un cartel colombiano extraviado.

“Estamos todos tranquilos”, indicó el padre de Figueroa Agosto mientras salía de la sala en compañía de sus dos hijos y dos nietos, hijos de Figueroa Agosto.

El hampón, que se ha convertido en una especie de leyenda urbana por su vida criminal y social en la República Dominicana, lucía el pelo rapado y  canas cubrían gran parte del cabello. También se mostró sumamente calmado al responder a las preguntas del juez.

“Entiendo eso señor”, indicó mientras se le indicaba que no podía apelar su declaración de culpabilidad.