Julio Medina: "Yo oro todos los días"
El padre del acusado de matar a Arellys Mercado, Jensen Medina, habla del desconsuelo que vive su familia.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 5 años.
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Julio Medina, padre de Jensen Medina Cardona, acusado de dar muerte a Arellys Mercado Ríos, pidió respeto para su hijo, a quien describió como un hombre trabajador con un récord intachable que a sus 32 años no ha hecho nada malo.
"Si la ley dice que usted es inocente hasta declarado culpable, aquí eso no se ha dicho", dijo ayer en entrevista con el programa Dando candela, de Telemundo.
Don Julio afirmó que su hijo "jamás" hubiera tenido la intención de disparar el arma que acabó con la vida de Arellys por ser un padre que es adoración con sus hijos, "dos nenas y un varón". Afirmó que la familia no es adinerada como se ha comentado y que para la defensa de su hijo han tenido que hacer "cosas grandes para poder sacar los chavos, toda la familia... y ya mismo hay que buscar más".
"Yo lloro todos los días y cada vez que viene una persona aquí y me echa los brazos y me da conforte, sigo orando por mi hijo", aseguró Medina al describir el desconsuelo que viven tanto él como su esposa y le deseó mucha fortaleza a Nitza Ríos, madre de Arellys. "También le doy consuelo porque es hija de ella y yo sé que ella también está sentida igual que nosotros. Ahí no murió un perro y acá tampoco. Está pasando por unas cosas bien fuertes también y yo pues le digo a ella (que tenga) mucha fortaleza ella también y su familia".
El padre de Jensen lamentó la forma en que se ha llevado el proceso de la vista de causa que se ve desde la semana pasada en el Tribunal de Fajardo. "En todo este sistema nunca nadie dijo nada de que él tiene un récord intachable, nadie ha hablado de eso, nunca. Sin embargo, los jueces de antes, cuando una persona tenía un problema o algo, el juez pedía el expediente, lo leía y de acuerdo a lo que decía entonces él tomaba decisiones".
Así las cosas, tiene sus esperanzas cifradas en los designios de Dios. "Que sea lo que el Señor diga. Yo estoy dispuesto a aguantar lo que sea, pero que él sea el que decida qué va a pasar con mi hijo".