El juez superior Anthony Cuevas Ramos, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, está por dar por terminada la controversia judicial entre el cantante de música urbana, Daddy Yankee, y su esposa, Mireddys González Castellanos, por el control de las corporaciones creadas para dirigir la afamada carrera musical del artista.

La pugna se suscitó a mediados de diciembre pasado, luego de que Daddy Yankee presentara la demanda de divorcio y en momentos en que Mireddys pretendió hacer un pago de dividendos por $100 millones.

Según hizo constar el juez en una de las siete órdenes judiciales que emitió en la tarde del lunes y en el que no le dio paso a la petición de Mireddys de nombrar un administrador judicial o síndico para las corporaciones Los Cangri y El Cartel Récords, sólo queda un asunto por atender en estas demandas radicadas por el artista.

“El único tramite que resta por atender en esta sala es la disposición confidencial acordada entre las partes”, señaló el jurista.

No obstante, el juez orientó a los abogados de Mireddys de que estos pudieran radicar una nueva demanda en la que reclamen nuevamente el nombramiento del administrador judicial para las corporaciones, de la cual es accionista. También apuntó a la posibilidad de que radiquen un “recurso de apelación, revisión o certiorari de conformidad con el procedimiento y en el término establecido” para contrarrestar sus decisiones de no dar paso al nombramiento del síndico para las corporaciones.

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Cuevas Ramos explicó que determinó no acceder a la petición realizada por la futura exesposa de Ramón Luis Ayala Rodríguez, nombre de pila del cantante, ya que “las partes alcanzaron un acuerdo que le puso fin a la única controversia a resolver; el derecho del accionista a examinar y fotocopiar el registro de acciones, la relación de accionistas y los demás libros de la corporación. En vista del acuerdo habido entre las partes, este Tribunal dictó la correspondiente sentencia, razón por la cual este asunto ha concluido”.

Ese primer acuerdo alcanzado entre las partes era a los efectos que Mireddys entregaría el control de las corporaciones, las cuales presidía, a Daddy Yankee.

Pero, varias acciones del reguetonero en dichas corporaciones, como mover $118 millones de las dos cuentas bancarias en el First Bank a una sola en Oriental Bank, así como nombrar a su hija mayor, Yamilette Ayala, a dirigir las corporaciones, llevaron a Mireddys a ser un reclamo para que Daddy Yankee no tuviese el control de estas.

En una de las mociones presentadas por sus abogados, Roberto Alonso y Mariel Colón Miró, se explicó que la intención de nombrar a una persona ajena a la familia era con el interés de “proteger los intereses de la Sociedad Legal de Gananciales como único accionista, de los acreedores de las Corporaciones y otras partes afectadas. Esto, con el propósito de que se manejen de manera imparcial y estructurada las operaciones corporativas mientras se dilucida la transición de la administración de las Corporaciones objeto del presente pleito”.

La petición de Mireddys provocó ataques entre los abogados. Ambas partes solicitaron sanciones por la controversia suscitada. Sin embargo, el juez no impuso ninguna.