El licenciado Edwin Prado no tendrá que prestar testimonio en el juicio federal que se sigue contra el expugil Félix Verdejo por el secuestro que culminó en el asesinato de Keishla Rodríguez -con quien Verdejo mantenía una relación sentimental- y la criatura por nacer que esta llevaba en su vientre.

En una orden emitida hoy por el juez federal Pedro Delgado Hernández, quien preside el proceso judicial contra el boxeador, éste informó a las partes su determinación, denegando la solicitud presentada por la defensa. Prado, quien en algún momento temprano en los procesos asesoró legalmente a Luis Cádiz Martínez, coacusado y principal testigo del ministerio público contra Verdejo, presentó el sábado una moción pidiendo que se anulara la petición de la defensa del boxeador para testificar en el caso y que, de hacerlo, ordenara que la comparecencia se hiciera a puertas cerradas. “Tras el examen del suplemento referido, el tribunal considerará que mis intereses de privacidad pesan más que la presunción de acceso público”, expresó el letrado en su “moción a restringir”, rezaba el recurso presentado por Prado Galarza.

Prado Galarza no fue el único que se opuso a que se le citara a declarar. Tambien lo hizo el ministerio público. Primera Hora tuvo acceso a una moción presentada por el ministerio público en oposición a la solicitud de sentar a declarar al licenciado Prado Galarza, por entender que la defensa pretendía utilizar el testimonio del abogado para impugnar “cuestiones colaterales (asuntos que no son relevantes a la litigación)”, como contradecir las razones por las que el testigo le mintió a agentes federales y al Gran Jurado.

“El Gobierno entiende que el abogado de la defensa está tratando de impugnar al Sr. Cádiz sobre cuestiones colaterales. Las declaraciones que pretenden impugnar son colaterales porque no son pruebas que establezcan o refuten ningún elemento de los delitos imputados. Por ejemplo, el hecho de que el Sr. Cádiz halara del pelo a la víctima en el vehículo, no hace más o menos probable que la muerte fuese el resultado del robo. Del mismo modo, el hecho de que el señor Verdejo disparara el arma o le diera el arma al señor Cádiz y le dijera que disparara, no hace más o menos probable que el señor. Verdejo, en complicidad con el señor Cádiz, usara y portara un arma de fuego (nótese que el Sr. Verdejo no está acusado de disparar el arma)”, argumentó la fiscalía en un extenso documento en el que además, establece que el propio testigo estrella reconoció las imprecisiones de su testimonio y la Defensa tuvo la oportunidad de interrogarlo y aclarar dichas imprecisiones. “Las razones por las que el Sr. Cádiz mintió a los agentes federales y a un gran jurado son secundarias a cualquier cuestión relativa a la culpabilidad o inocencia en este caso”, sostuvo el ministerio público en la moción de oposición.

La defensa pretendía utilizar el testimonio del abogado para imputar la credibilidad de Cádiz Martínez, luego que el coacusado reconociera que le mintió a agentes federales y ante el Gran Jurado, pero que lo hizo “por instrucciones de su abogado”. Mientras, el hermano de Cádiz Martínez, Ricardo, también declaró que ofreció pagar los servicios legales de Prado con drogas, pero que nunca recibió una respuesta del letrado.

En el día de ayer los licenciados Gabriela Cintrón Colón y Jason González Delgado radicaron una petición de absolución perentoria de su cliente. En la petición, que fue denegada por el juez, los abogados alegaban que el Ministerio Público no presentó evidencia que vincule al expúgil con la muerte de Rodríguez Ortiz.

La defensa además sostiene que en su testimonio, Cádiz Martínez intentó adjudicarle a Verdejo gran parte de su participación en el crimen de Rodríguez Ortiz.