Investigadores analizan escenas vinculadas al asesinato de la agente Brenda Liz Pérez
La policía estatal de 46 años es la primera víctima de violencia doméstica reportada este año.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
PUBLICIDAD
Un equipo especial de investigadores se encuentra analizando las tres escenas vinculadas al crimen de la agente Brenda Liz Pérez Bahamonde, de 46 años, quien presuntamente fue baleada por su expareja durante la noche de ayer, jueves, en las parcelas Vázquez del sector Naranjo, en Salinas,
Los investigadores buscar compilar toda la evidencia circunstancial disponible para llevar un caso sólido ante el tribunal.
Pérez Bahamonde, adscrita a la División de Homicidios de Guayama y con más de 20 años en la Uniformada, es la primera víctima de violencia doméstica reportada en lo que va de año, según se desprende de las estadísticas diarias del Negociado de la Policía de Puerto Rico (NPPR). La agente ingresó a la Policía en octubre del 2000.
Relacionadas
Anoche, personal de la División de Inteligencia Criminal arrestó como sospechoso al agente José Rivera Velázquez en su residencia localizada en el barrio Las Vegas, en Cayey.
Rivera Velázquez está adscrito a la División de Seguridad y Protección de Aibonito, y perteneció a la escolta del excomisionado Henry Escalera Rivera.
La primera escena se desarrolló en el interior de la residencia de la agente, donde le dispararon a eso de las 7:09 p.m., de acuerdo con la querella sobre detonaciones en ese vecindario que se registró en el Sistema de Emergencias 9-1-1.
Posteriormente, a las 7:30 p.m. se solicitó una ambulancia para la División de Autopistas de Salinas, lugar al que la agente llegó malherida manejando su vehículo Toyota CHR, color gris, del 2019, donde presuntamente al pedir auxilio logró revelar lo ocurrido.
Poco después, la agente fue declarada muerta en el Hospital Menonita, en Guayama.
Alrededor de las 10:00 p.m. Rivera Velázquez fue arrestado en su residencia. Su automóvil fue sellado y ocupado mientras se le solicita al tribunal una orden para su registro, ya que su arma de reglamento estaba en su interior. Esta medida se toma para preservar la cadena de evidencia.
El coronel Roberto Rivera, quien dirige la Superintendencia Auxiliar de Investigación Criminal, reveló que hoy se le va a tomar declaración jurada a los agentes que la asistieron cuando llegó herida al estacionamiento del cuartel, como parte de las gestiones investigativas que realizarán. Estas gestiones incluyen la ocupación de vídeos de seguridad para establecer en tiempo y espacio la trayectoria de los sucesos.
“Vamos a entrevistar a los agentes de la División de Autopista para que la fiscal les tome la declaración jurada, se van a analizar los carros de ambos. Ante la negativa de él (detenido) de cooperar, vamos a trabajar el caso con prueba circunstancial levantando prueba sólida para llevarlo al tribunal”, sostuvo Rivera.
La agente poseía una orden de protección contra su expareja tras solicitar el desalojo del hogar que compartían en noviembre, pero la misma caducó a principios del mes de diciembre.
Según el coronel Rivera, no tenían conocimiento de la misma porque “ella lo trabajó callada”. No obstante, posteriormente aclaró que fue desarmado y hace tres semanas le fue devuelta el arma de fuego al agente de 52 años, tras una evaluación psicológica.
“Ella acudió al tribunal para solicitar una orden de desalojo de la residencia y la juez le expidió también una orden de protección. Se cumplió con el protocolo y fue desarmado. Cuando pasaron los 30 días la orden se venció la segunda semana de diciembre y como ella no la renovó porque su interés apremiante era el desalojo, él solicitó que lo rearmaran y luego de una evaluación psicológica le devolvieron el arma hace tres semanas”, detalló Rivera.
La víctima no estaba residiendo en la casa de Salinas y se indagan las razones por las que acudió a la vivienda donde fue acechada y herida.
También dio a conocer que al detenido se le brindó asistencia médica por unas lesiones en las manos y laceraciones que aparentan ser de cristales rotos.
La fallecida fue descrita como muy profesional, dedicada a su trabajo y un excelente ser humano.
Pérez Bahamonde y Rivera Velázquez no procrearon hijos.
De su lado, el comisionado del NPPR, Antonio López Figueroa expresó a través de Twitter su consternación por los trágicos hechos. El funcionario anoche se movilizó al hospital para brindarles apoyo a la familia de la agente.
Consternado por la pérdida de una de mis policías, no solo por el hecho de su muerte, sino por las circunstancias en que ocurrió.
— Coronel Antonio López Figueroa (@prcompolicia) January 28, 2022
Mi solidaridad con sus familiares y todos los compañeros en este momento tan difícil.
“Consternado por la pérdida de una de mis policías, no solo por el hecho de su muerte, sino por las circunstancias en que ocurrió. Mi solidaridad con sus familiares y todos los compañeros en este momento tan difícil”, expuso López Figueroa.
El @PRPDNoticias y el @DSPnoticias está de luto ante la pérdida de una compañera agente de la Policía de Puerto Rico. La investigación de lo ocurrido está en curso. Nuestro más sentido pésame a su familia y a sus compañeros de trabajo. QDEP.
— Alexis Torres (@prsecseguridad) January 28, 2022
La agente Mary A. Ramos, adscrita a la División de Homicidios de Guayama, junto a la fiscal María López Aponte tienen a cargo la pesquisa.