Toa Baja. Unos 3,000 residentes de siete comunidades de Toa Baja podrían estar afectados por los niveles del embalse La Plata que provocaron las lluvias de la tormenta tropical Ernesto. Ya a las 9:40 a.m. las primeras alarmas sonaron, antes de que comenzara el esfuerzo de desalojo.

El equipo de la Oficina Municipal para el Manejo de Emergencias (OMME) se dirigirá a toda la región oeste, incluyendo a Toa Baja Pueblo, La Vega en San José, Villa Calma 1 y 2, Toaville, Monserrate, Ingenio y parte de Campanilla para remover a personas que podrían estar vulnerables.

En estas áreas residen una suma global de 7,000 a 10,000 personas, aunque el alcalde Bernardo “Betito” Márquez augura que son 3,000 las que podrían estar directamente afectadas por el fenómeno.

“Esto es un elemento de salvar vidas. La gente tiene que velar por su bienestar particular, personal”, comentó el ejecutivo municipal a Primera Hora a las afueras de la OMME al resaltar que ya una familia que reside en el casco urbano fue movida a un refugio esta mañana. Las compuertas del embalse La Plata están abiertas desde el fin de semana, pero la escorrentía que arrastran las aguas es lo que amenaza a estas comunidades.

Además, la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) también ha hecho descargas preventivas durante el fin de semana en las represas, debido a la cantidad de lluvia que se esperaba por el paso del fenómeno, que pudiera superar las 10 pulgadas en zonas específicas. Según el alcalde, el golpe de agua tras abrirse las compuertas de la represa podría tener sus efectos más adversos en Toa Baja dentro de una hora, por lo que ya se cerró la carretera PR-2 en dirección hacia el área del concesionario Adriel Toyota, en Dorado, -llamado cruce de La Virgencita- donde primero se sentiría ese impacto.

Se exhortó a la ciudadanía a no transitar por el lugar y, si es necesario, a que tomen vías alternas. “Todo depende lo que ocurra con esta potencial inundación”, indicó el funcionario. Los refugios abiertos al momento son las escuelas Pedro Albizu Campos en Levittown, Francisca Dávila Semprit en Sabana Seca, José Robles Otero en Ingenio, Ernestina Bracero Pérez en Candelaria y el Centro Comunal de Pájaros.

“Vamos a ver ahora cuál va a ser el comportamiento de este mensaje ante la inminente inundación. Nosotros estamos listos y si hay que abrir más refugios estamos prestos para poderlo hacer”, aseguró.