Dos universitarios murieron esta madrugada en un aparatoso accidente que se registró en la avenida Alfonso Valdez Cobián, cerca del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), informó la oficina de prensa del Negociado de la Policía de Puerto Rico.

El conductor de un vehículo Ford Mustang, color gris y del año 2023, transitaba a eso de las 4:30 a.m. de este jueves en aparente exceso de velocidad y, al llegar a la intersección con la avenida Alfonso Valdez Cobián, frente a una de las entradas del RUM, perdió el control del volante e impactó un árbol por el lado derecho.

En el vehículo viajaban cuatro personas.
En el vehículo viajaban cuatro personas. (Suministrada)

Una de las víctimas fue el pasajero frontal identificado como José Rivera Rivera, de 21 años, quien cursaba su cuarto año de Agrimensura y Topografía en el RUM.

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Mientras que, otro pasajero que iba en la parte de atrás, identificado como Josué Rodríguez Arroyo, que podría tener unos 18 años, murió en la escena.

Erick Caraballo, el cuarto pasajero, fue recluido en el Centro Médico de Puerto Rico, en Río Piedras, debido a su condición de cuidado.

El conductor, identificado como José Enrique Martínez Rivera, de 21 años y estudiante de ingeniería, fue trasladado al Hospital Metropolitano para realizarle la prueba de sangre, ya que se negó a someterse a la prueba de aliento para detectar la presencia de alcohol en su organismo.

El director de la División de Patrullas de Carreteras de Mayagüez, el teniente Gualberto Cruz, indicó que todos eran amigos, estudiaban en el RUM y residentes de Ponce.

Recurrimos al tribunal para solicitar una orden para tomarle muestras de sangre”, respondió el teniente, quien agregó que el conductor, representado por el licenciado Pablo Colón, no ha sido cooperador con la pesquisa.

En el interior del vehículo se ocupó una pistola para la cual el conductor tenía licencia de portación vigente.

Este se expone a que se le radiquen dos cargos por homicidio negligente si se prueba que estaba manejando bajo los efectos de bebidas embriagantes.

La escena es investigada por los agentes César Arocho y Herminio Sánchez, adscritos a la División de Patrullas de Carreteras de Mayagüez y la fiscal Frances Bravo.