Bajo un candente sol, familiares de las víctimas y sobrevivientes de la masacre de La Tómbola celebraron un acto de recordación esta tarde.

Hoy se cumplió un año de la balacera que dejó nueve muertos y 20 heridos.

Entre lágrimas, los asistentes recordaron el suceso, que tomó por sorpresa a la comunidad llenándola de luto.
“Ha sido bien difícil. Es algo que no he superado”, dijo Carmen García, quien perdió a su bebé de ocho meses de gestación.

“Fue algo tan grande y tan grande. Lo único que se escuchaba eran tiros y tiros”, agregó García, a quien le tuvieron que reconstruir el útero, la vejiga y el intestino tras el impacto de bala.
Otra que  lamentó su pérdida fue Carmen Semprit:

“El Señor da fuerza y fortaleza. La pérdida de Pedro (hermano) ha sido bien dolorosa y todavía estamos bregando con eso”, dijo la joven, quien también fue herida esa noche.

Dentro de su inocencia, la niña Omarys Fonseca de 10 años relató que este año ha sido “bueno” y que la recuperación también fue bastante buena a pesar de que, “mami me decía que no me parara y yo me ponía a caminar cuando ella no me veía”.

A Omarys la hirieron en una pierna. Pero más que la cicatriz en la piel carga una en el recuerdo.

“Siento miedo. A veces, cuando escucho las balas, empiezo a llorar. Igual, cuando hay peleas, me asusto y comienzo a llorar”, relató la niña.

A pesar de que días después del tiroteo fue arrestado Christian Ortiz Rivera por posesión ilegal de armas, pero vinculado a la masacre, y de que Alexis Candelario, el supuesto autor intelectual de los hechos, duerme en la cárcel federal desde diciembre acusado por otros delitos, no se ha producido acusación formal por estos hechos.