Hallan pierna en playa donde buscan a turista que fue arrastrado por las corrientes
Al momento no han podido confirmar que se trate del hombre de 61 años desaparecido desde el viernes.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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Buzos de Manejo de Emergencia Municipal del área de Arecibo, hallaron en horas de esta tarde una pierna en el área de la Playa Caracoles en el barrio Islote del mencionado municipio donde las autoridades realizan, desde el pasado viernes, la búsqueda de una persona arrastrada por las corrientes marinas.
Según indicó el informe de la Uniformada, la extremidad será enviada al Instituto de Ciencias Forenses, para la investigación correspondiente y corroborar si pertenece a la persona desaparecida.
Agentes del Negociado de la Policía de Puerto Rico, adscritos a la División de Homicidio del cuerpo de Investigaciones de Arecibo, en unión al fiscal de turno continúan con la investigación.
Mientras, que agentes del Negociado de Fura, Policía Estatal de Arecibo, la Policía Municipal de Arecibo, Manejo de Emergencia Municipal del área de Arecibo y la Guardia Costera, continúan con la búsqueda del hombre arrastrado por las corrientes.
El pasado viernes, un turista murió ahogado y su padre permanece desaparecido tras ser arrastrados por el fuerte oleaje en la mencionada playa.
El director del Negociado de Fuerzas Unidas de Rápida Acción, teniente coronel José M. Rodríguez, reveló que en el lugar había un grupo de 22 turistas de Arizona que se encontraban en la isla de vacaciones y que se hospedaban en Dorado.
“Decidieron irse para la playa quizás por desconocimiento de el fuerte oleaje y uno de ellos de 32 años murió y no aparece su padre de 63 años. Ellos estaban entrando y saliendo del agua en pequeños grupos cuando fueron arrastrados por la corriente marítima con esas consecuencias”, detalló.
El fenecido fue identificado por las autoridades como Damián Walker, quien tenía 33 años, mientras que el desaparecido fue identificado como Luis Walker, de 61 años.
El joven fue rescatado por sus familiares, pero llegó muerto a la orilla. Su padre fue el último que se lanzó al agua para socorrerlo y quedó atrapado por las resacas peligrosas que se experimentan en las playas del norte y este de la isla.