El sargento Manuel Cruz Carlo, director de la División de Violencia Doméstica de Carolina, informó, que luego de una investigación a fondo de la querella por intimidación radicada el domingo por la expareja de un agente de 58 años, adscrito al cuartel de Canóvanas, la fiscal Hazel Justison, determinó que no existían los elementos para radicarle cargos criminales.

Los hechos ocurrieron durante la noche del sábado pasado, cuando surgió una discusión entre las partes, que se encuentran en proceso de divorcio, cuando uno de ellos esperaba para recoger a un hijo de 18 años y ella se sintió intimidada.

Cruz Carlo explicó que se realizó una investigación conforme a los procesos criminales, los protocolos de Violencia Doméstica y de la Reforma supervisada por el Tribunal federal, se informó en un comunicado de prensa.

Aunque no se configuraron elementos del delito, de manera preventiva, se recomendó solicitar una orden de protección, que fue expedida provisionalmente por el Tribunal de Humacao.

Cruz Carlo indicó que, como parte del protocolo que activa la Policía cuando se realiza una querella por violencia doméstica contra un miembro de la Uniformada, este es desarmado de manera inmediata y arrestado o citado en lo que se concluye la investigación penal. De igual manera, se inicia paralelamente otra investigación de carácter administrativo.

Mientras la orden de protección esté vigente y la investigación administrativa no haya culminado, el agente permanece desarmado y se le requiere asistir ante un psicólogo.