La Fiscalía federal se opuso este viernes a que el exalcalde de Guaynabo, Ángel Pérez Otero, se le conceda permanecer en libertad bajo condiciones de fianza en lo que el Primer Circuito de Apelaciones de Boston determina el proceder de la apelación de su convicción y su sentencia.

“Porque el demandado no ha presentado una cuestión sustancial de hechos o de derecho que sea probable que resulte en una revocación o en un nuevo juicio, Estados Unidos se opone a la moción del acusado”, indica la respuesta de la Fiscalía federal.

La postura la asumió el fiscal federal Nicholas Cannon al pedido que hizo la defensa de Pérez Otero mediante una moción de “emergencia” el pasado 6 de marzo.

Según trascendió, el convicto exalcalde por corrupción pública deberá entregarse a prisión en o antes del próximo martes, 26 de marzo, a una cárcel en Alabama.

Tras conocer esta fecha límite, el abogado José Olmo presentó la moción con la intención de que Pérez Otero no fuera a prisión en lo que se atiende la apelación del caso.

“Esperamos que la jueza (Aida Delgado Colón) lo vea con bueno ojos, porque no es nada extraordinario lo que estamos pidiendo y él ha cumplido todas las condiciones impuestas y cuando tenga que cumplir cárcel, lo hará”, sostuvo el abogado a Primera Hora tras presentar la moción.

Pérez Otero resultó culpable en un juicio por jurado que terminó el 22 de marzo de 2023 por conspiración, soborno y extorsión.

Los cargos estaban relacionados a los sobornos que recibió del empresario Oscar Santamaría a cambio de contratos en el municipio de Guaynabo.

El exalcalde fue sentenciado por la jueza federal Delgado Colón el pasado 12 de febrero a cumplir 63 meses de prisión o lo que representa cinco años y tres meses bajo confinamiento. Esta sentencia dio paso a la apelación del veredicto y la sentencia, la que fue radicada el pasado 23 de febrero.

La Fiscalía opinó que esta convicción no cambiará durante una apelación.

“El veredicto del jurado en este caso se basó en pruebas abrumadoras de que el acusado participó en un esquema de soborno para aceptar pagos en efectivo a cambio de conceder beneficios en actos oficiales bajo su rol de funcionario electo más poderoso de Guaynabo”, señaló la Fiscalía.

La respuesta acepta que Pérez Otero no es un riesgo de fuga. Empero, insiste en que una apelación no cambiaría su convicción.

“Incluso, si él prevaleciera en apelar, no daría lugar a un nuevo juicio, ni a una reducción significativa de la sentencia por cada cargo de condena”, precisó el fiscal.