Justo cuando la mirilla pública se centra como nunca en los jueces del Tribunal Supremo ante determinaciones sobre asuntos neurálgicos relacionados con sus propias pensiones y las de los maestros del sistema público, el juez presidente Federico Hernández Denton defendió enérgico a los togados, tras anunciar su retiro del cargo.

Además, aunque declinó pronunciarse sobre cambios en lo dispuesto constitucionalmente para nombrar a los jueces, ante inquietudes reiteradas de nuevas medidas para evitar la politización en la rama judicial, Hernández Denton afirmó que el sistema ha garantizado "muchos años de buen servicio... aunque en ocasiones hay decisiones en las que los jueces son criticados".

"No podemos perder de perspectiva la función de hacer justicia... Nuestra aportación al País es en el servicio diario que damos a todos los ciudadanos y ciudadanas, y lo hacemos con mucho cariño, con mucha sensibilidad y con un trato equitativo y conscientes de que servimos a Puerto Rico con la mayor dedicación, y sobre todo con independencia de criterio. Es bien importante que el País sepa que la independencia judicial no es para defender a los jueces de críticas externas, es para garantizar a los ciudadanos que los jueces juzguen con rapidez, eficiencia, con criterios de imparcialidad, sin presiones externas o internas", sentenció.

PREGUNTA: ¿Cree que la independencia judicial es realmente un concepto entendido y apreciado por el pueblo?

RESPUESTA: "Creo que sí, pero siempre falta por explicar más. Creo que el pueblo debe entender, igual que entiende la figura de un árbitro en un juego de pelota o en un juego de baloncesto, tiene que entender que están los jueces, los árbitros, y estamos ahí para cantarlas como las vemos y para eso se necesita ser independiente. Aunque no es paralelo totalmente la figura del árbitro, pero el pueblo debe entender, como en el deporte, que uno tiene que tener unos árbitros que cantan la jugada de acuerdo a las reglas. A veces uno comete errores, todos cometemos errores, pero de eso es que se trata el concepto de independencia judicial. Uno quiere árbitros que sean independientes y no depende de dónde uno vaya a jugar, ni depende de las presiones o quién les esté pagando".

P: ¿Qué cualidad principal debe tener un buen juez del Tribunal Supremo?

R: "Mucho temperamento judicial. Creo que el temperamento judicial es importantísimo. Además, creo que es muy importante entender y defender la independencia judicial en todas sus vertientes, tener la valentía para defenderla".

P: ¿Cómo usted ha logrado eso?

R: "Aplicando el derecho y la Constitución como entiendo que se aplica en los distintos casos. Uno tiene como norte el derecho y tiene como norte la Constitución".

P: ¿Tiene recomendaciones para el gobernador sobre quién debe ser su sucesor?

"Siempre estoy en la mejor disposición de compartir y hacer recomendaciones basados en perfiles. Pero no es el momento mío para trazar esos derroteros".

P: ¿Cuáles han sido sus mayores logros en este cargo?

R: "La modernización de la Rama Judicial y lo que tiene que ver con todo el concepto de equidad, para asegurarnos mayor acceso a la justicia de todos nuestros ciudadanos. Otro logro importante es la transparencia que los tribunales estén cada vez más más accesibles al público y creo que los proyectos que hemos encaminado con la colaboración con la Asociación de Periodistas y la Asociación de Fotoperiodistas es un logro muy grande".

P: ¿Qué le gustaría que su sucesor mantuviera?

R: "Creo que casi todos los proyectos importantes están encaminados y creo que son proyectos que cualquier sucesor o sucesora va a darle continuidad. Eso siempre ha sido la tradición en la rama, lo hice yo, lo hizo la jueza (Miriam) Naveira, lo hizo el juez (José) Andreu, lo hizo el juez (Víctor) Pons y estoy seguro de que va a pasar lo mismo".