El individuo investigado por la muerte de su pareja en hechos ocurridos el sábado en la mañana en el residencia Luis Llorens Torres, quedó hoy bajo custodia de las autoridades federales, quienes se espera le revoquen una probatoria por violación a la Ley de Armas, dijo esta tarde la teniente Ana Rosario, directora de la División de Homicidios de San Juan.

Según explicó, la investigación sobre la muerte de Vivian Franco Martínez, de 30 años, tomará un tiempo adicional por lo que todavía no se presentarán cargos por asesinato. Una fuente policiaca indicó que el Instituto de Ciencias Forenses todavía no ha realizado la autopsia y el personal de Homicidios necesita entrevistarse con el patólogo del caso. 

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El domingo, el sargento Arnaldo Ruiz, de la División de Homicidios de San Juan, indicó que el hombre admitió el crimen de Franco Martínez poco después que se entregó a las autoridades. 

Ruiz indicó que el sujeto y Franco Martínez eran pareja hace unos cuatro o cinco meses. Este medio supo por una fuente policiaca que Martínez Ramos dijo inicialmente que la mujer le había arrebatado un arma que manejaba y se hizo el disparo mortal. Luego esa versión cambió y dijo que él hizo el disparo.

El cadáver de Franco Martínez presentaba un impacto de bala en un pómulo. El cuerpo fue encontrado el sábado, de madrugada, en la cama de uno de los dormitorios de su apartamento.

Fue a través del oficial de probatoria del individuo que se pudo hacer contacto con el ahora sospechoso del crimen.

El cuerpo de Franco Martínez fue encontrado por su hija de 14 años. Bajo el cuerpo se recuperó un proyectil que fue referido al laboratorio de balística del Instituto de Ciencias Forenses (ICF), al igual que un casquillo de calibre 9 milímetros, recuperado sobre el pavimento frente al edificio donde ubicaba la escena del crimen.

Dos trabajadores sociales le dieron asistencia a la menor.

Este medio tuvo acceso a la acusación a nivel federal del individuo sospechoso. El documento consigna que fue arrestado el 12 de marzo de 2014, en medio de un operativo antidrogas en el residencial Las Dalias, en San Juan. Allí fue sorprendido con un radio de telecomunicaciones y con una pistola Glock modificada para funcionar automática.