Un exoficial correccional del Centro Metropolitano de Detención en Guaynabo se declaró culpable este martes en el Tribunal Federal de Puerto Rico por violar los derechos civiles de un confinado tras golpearlo con fuerza excesiva mientras este tenía las manos esposadas detrás de su espalda.

El fiscal federal W. Stephen Muldrow informó en un comunicado de prensa que Emilio Rodríguez Arroyo enfrentaba un cargo por privación de derechos civiles bajo el color de la ley.

Según los documentos judiciales y la información presentada en el tribunal, Rodríguez-Arroyo privó el pasado el 8 de noviembre de 2021 al sobreviviente “E.R.R.” de su derecho de la Octava Enmienda federal, que establece que “no se exigirán fianzas excesivas, ni se impondrán multas excesivas, ni se infligirán penas crueles e inusitadas”, cuando el imputado lo golpeó en la zona de la cabeza y la cara poco después de rociar “pepper spray” en esa zona, y mientras este “estaba esposado por la espalda, rodeado y controlado por otros agentes, y sin oponer resistencia”.

La sentencia del acusado está prevista para el 17 de julio de 2023, ante la jueza Silvia Carreño Coll, informó la Oficina de Prensa de la Fiscalía Federal.

El caso fue investigado por el Negociado Federal de Investigación (FBI) y la Oficina del Inspector General del Departamento de Justicia. Este fue procesado por el fiscal federal adjunto Alexander Alum y el abogado litigante Eric Peffley, de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia de los Estados Unidos.