“Nos violaron los derechos”.

Entre sollozos, Wanda Hernández soltó este grito desgarrador cuando vio que los alguaciles esposaban a su compañero de vida, el productor Sixto Jorge Díaz Colón, conocido como Sixto George, y se lo llevaban por una puerta trasera de la sala 5 del Tribunal Federal de Distrito para Puerto Rico, con sede en el Viejo San Juan para ingresarlo en el Centro de Detención Metropolitana en Guaynabo.

Los niños de Díaz Colón no aguantaron las lágrimas y se aguantaban a sus sillas mientras enrojecían de la pena, tras haber escuchado el veredicto de culpabilidad contra su padre y la decisión del juez Francisco Besosa de que sería ingresado a prisión de inmediato.

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El padre del ahora convicto federal por extorsión, Jorge Díaz, tampoco pudo contener su malestar. “Es injusto, es injusto”, repetía.

La escena familiar dio por culminado diez días de un juicio en el que Díaz Colón fue encontrado culpable de tres delitos, el de intento de extorsión, extorsión y destrucción de evidencia, por un jurado conformado por siete mujeres y cinco hombres.

A las afuera de la corte, el padre de Díaz Colón volvió a repetir que las autoridades federales “cometieron una injusticia” en contra de su hijo.

“Para eso gracias a Dios hay un Tribunal Apelativo”, soltó.

El hermano del convicto, Jorge Díaz Colón, por su parte, señaló que la familia atraviesa por un “momento bien difícil”.

Si les digo mis sentimientos como puertorriqueño, el deseo que tengo en estos momentos es de vender mi casa y de irme de mi país. Eso es lo que siento”, indicó.

Alegó que la corte federal es controlada por puertorriqueños.

“Sabe lo difícil que es para nosotros como familia perder la fe en las instituciones. Es bien difícil, porque de repente uno piensa que, si Sixto está pasando por eso, mañana quién será el próximo puertorriqueño”, indicó, antes de comentar que cuando esposaban a su hermano le gritó que lo amaba.

La familia ahora descansa en el resultado que puedan lograr en un proceso apelativo que emprenderá el abogado de Díaz Colón, Rafael Castro Lang.

El letrado explicó a la prensa que la apelación tendría que someterla al Tribunal de Apelaciones en el Primer Circuito de Boston una vez Díaz Colón sea sentenciado. La fecha fue fijada para el 5 de mayo próximo.