Las Policía descubrió un vagón lleno de pirotecnia en los predios del almacén que guardaba el mismo material ilegal y que se quemó anoche en Trujillo Alto.

El inspector Rafael Romero, director de la División de Explosivos, explicó que un perro de la Policía marcó al lado del vagón, por lo que el fiscal Lawrence Snyder solicitó una orden de allanamiento a la jueza Ana Suárez. Al ser autorizado, se abrió el vagón. 

El material encontrado será confiscado y llevado una de las sedes de la citada división en Isla de Cabras.

La Policía también se percató que aunque la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) le había cortado hace unos años el servicio al hombre por falta de pago, el aire acondicionado de un apartamento tapado con tolas continuó funcionando. La corporación pública finalmente cortó la conexión ilegal.

Relacionadas

Mientras, la búsqueda del propietario continúa.

Romero indicó que ha surgido información variada sobre la identidad del dueño de la propiedad, ubicada en el sector Conquistador, de Trujillo Alto. 

“Han dicho que tiene una hormigonera y un gravero y han dicho que está en Estados Unidos, que está en Santo Domingo o que está por el área. Lo cierto es que no lo hemos localizado”, sostuvo el oficial.

De la investigación levantada en la escena se desprende que el fuego fue causado por una conexión ilegal de energía eléctrica y que el hombre tiene una deuda de $9,000 con la AEE. “Se estaba robando la luz”, dijo Romero.

Más temprano en el día el jefe auxiliar de Prevención de Incendio, Manuel Medina Moya, indicó que el almacén destruido, donde se ocupó pirotecnia, no tenía permisos de Bomberos ni de otras agencias pertinentes. Estaba ubicado en un lote comercial que se dedica a la distribución y alquiler de equipo pesado.

En el lugar también hay unos apartamentos, pero nadie resultó herido.

Se indicó que la cantidad de pirotecnia guardada en el lugar podía llenar un vagón de carga. Eso provocó que los Bomberos de Trujillo Alto, Río Piedras y de Operaciones Especiales trabajaran desde las 10:30 p.m. del martes hasta cerca de las 3:00 a.m. de hoy, miércoles, para extinguir el incendio en su totalidad. 

Medina Moya contó que en el almacén había “material explosivo de gran poder confinado en un área”. Por tal razón, se demoraron horas en extinguir el fuego, cuyo origen aún es desconocido. 

Detalló que lo más que se guardaba en el lugar eran unas baterías que pueden tener entre 50 a 100 cohetes. No se encontraron cuartos de dinamita. 

Además de las consecuencias criminales, el propietario del almacén se expone a multas de hasta $10,000 por violación al Reglamento de riesgo de incendio, no tener permiso de Bomberos para operar un almacén de pirotecnia, así como por tener tanques expuestos, entre otras cosas, informó el funcionario. 

Por su parte, el jefe del Cuerpo de Bomberos, Ángel A. Crespo, anunció su intención de multar a los propietarios del material tan pronto sean identificados. 

Además, adelantó que realizará operativos interagenciales para identificar y responsabilizar a personas que estén comerciando y almacenando pirotecnia ilegal, con el fin de reducir la posibilidad de que explosiones como las registradas en Hormigueros y Trujillo Alto vuelvan a poner en peligro vida, salud y propiedad.

“Recabamos de la cooperación ciudadana para que nos ayuden en nuestra misión de identificar los lugares y/o seres que puedan estar ocultando estos explosivos”, exhortó Crespo en declaraciones escritas. 

Visite la portada de Primerahora.com