Las autoridades federales tomaron custodia de Ramsell Jadiel Álamo Rivera, de 27 años, para iniciar el proceso de revocación de la probatoria de un caso por “carjacking” y encarcelarlo en el Centro Metropolitano de Detención en Guaynabo, por violar las condiciones impuestas por el tribunal, tras presuntamente confesar ayer, jueves, que cometió el crimen de su amiga, Mariel Crystal Seda Ocasio, de 23 años, quien estaba desaparecida hace más de un mes.

Álamo Rivera, quien también se desempeñaba como guardia de seguridad, condujo al mediodía de ayer a los investigadores de la División de Homicidios de San Juan hasta matorral usado como vertedero clandestino, en la calle Eucalipto del sector Los Dávila, en el barrio Campanillas, en Toa Baja, donde arrojó su cadáver y algunas pertenencias. Su teléfono celular no se ha localizado, por lo que las autoridades continúan buscándolo.

Los restos encontrados ayer en el lugar podrían ser los de Seda Ocasio, quien estaba desaparecida desde del 12 de abril cuando el hombre la recogió en su residencia en la calle 19 de la urbanización Hills Brothers, en Río Piedras, para dar un paseo corto y la joven nunca regresó.

“Le será revocada la probatoria y quedará en custodia federal, mientras terminamos la fase investigativa”, respondió el director del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan, el inspector Edwin Figueroa Maldonado.

El funcionario informó ayer que llegaron la escena tras una de varias entrevistas a Álamo Rivera, quien fue la última persona que la vio viva. Al ver que las evidencias obtenidas desmintieron todas sus coartadas, el hombre confesó que la asesinó. La pesquisa reveló que esa noche compartieron en la intimidad de un motel y que pudo haberla estrangulado durante una discusión.

“En una entrevista que se le hizo a Ramsell, (el último) que compartió con ella, terminó admitiendo que la asesinó y nos trajo donde tiró el cuerpo... está en un pastizal, estaba la osamenta y la misma descripción de la ropa con la que desapareció, y el mismo color de tenis”, declaró Figueroa.

Ambos tenían una relación por espacio de cinco años en la que acostumbraban a salir, presuntamente, consumir marihuana y él, en ocasiones, la acompañaba para que compartiera con alguno de los contactos que tenía a través de una plataforma por suscripción dirigida a los creadores de contenido para adultos.

El vehículo del Ramsell, descrito como un Toyota Yaris, color vino y del 2008, fue ocupado el 19 de abril, que ya fue trabajado por los investigadores del Instituto de Ciencias Forenses, así que las autoridades ya cuentan con esa prueba.

El pasado 14 de mayo, tras obtener la última localización de su teléfono celular, entre la noche y la madrugada del día siguiente a la desaparición de la mujer y no dar con ella, los agentes se movilizaron al barrio Campanilla en Toa Baja, donde realizaron una extensa búsqueda, sin ubicarlo.

El lugar donde encontraron los restos está relativamente cerca de la zona recorrida inicialmente.

La antropóloga forense Meisshialette Ortiz Quiñones, la patóloga forense, Paola Luna García e investigadores forenses examinaron la escena y realizarán el análisis científico de los restos para determinar si son humanos y corroborar su identidad y la causa y manera de muerte.

El agente Eric Ortiz Rodríguez y el sargento Martín Ríos, adscritos a la División de Homicidios de San Juan tienen a cargo la investigación, junto a las fiscales Melissa Jiménez y Laura Arill.