A horas de que inicie el juicio por agresión contra el alcalde de Guánica, Martín Vargas, trascendió una declaración jurada en la que un empleado municipal alega que el incidente fue planificado y que la presunta víctima se agredió a sí mismo para hacerle daño a la aspiración del líder popular de llegar a la Legislatura como senador por el distrito de Ponce.

Vargas fue acusado en verano de un cargo de agresión agravada de cuarto grado luego de que supuestamente golpeara al expolicía Neftalí Corales Casiano en una actividad en el parque de pelota Carlos M. Ramírez de Guánica, en mayo pasado.

La declaración jurada que trascendió hoy fue suscrita el pasado 6 de septiembre por Harry Alberto Rodríguez Sáez, quien se identifica como un chofer del municipio, de ideal estadista y afiliado al Partido Nuevo Progresista (PNP).

En el documento, divulgado por Wapa Radio 680 y del que este medio obtuvo copia, Rodríguez Sáez alega que el supuesto incidente de agresión fue planificado por Corales Casiano para hacerle daño al alcalde.

 "Corales Casiano me comunicó días antes del incidente que 'a ese infeliz', refiriéndose a Martín, le iba a destruir la carrera política", indica la declaración, donde se hace referencia a una visita que hizo el querellante a una ferretería para reclamarle a la esposa del alcalde el haber mencionado su nombre en un programa de radio del Partido Popular Democrático (PPD).

"En esa conversación me dijo 'que ese infeliz, me tengo que desquitar de él, tengo que destruir su carrera política'" y que "a Martín había que hacerle algo para acusarlo, meterlo preso", agregó.

Después de eso fue que ocurrió el incidente, del que Rodríguez Sáez se enteró cuando el propio Corales Casiano lo llamó para contárselo.

 "El jueves, 17 de mayo, en la mañana, con una voz quejándose, Neftalí me dijo 'no supiste', y yo le dije 'de qué tú hablas' porque yo no tenía conocimiento de nada, y él me dijo 'me encontré al alcalde en el parque de Bélgica y allá fui y le dije aquí estoy, déjate de estar hablando de mí, y cogí y aprovechando la oprotunidad me di con el bonete o guardalodo y le dije te lo dije, te iba a destruir la carrera piolítica, me diste, me diste y llamé a un guardia y lo denuncié, logré hacer lo que te dije'", relató en la declaración jurada.

 En el documento también se menciona que Corales Casiano trabaja para Santos Seda (Papichi), candidato a alcalde de Guánica por el PNP, y que en muchas ocasiones los tres viajaban en una camioneta gris marca Ford, propiedad del Senado, para hablar de política.

Corales Casiano fue expulsado de la Uniformada por actos ilegales relacionados a violaciones a la Ley de Armas y la Ley de Sustancias Controladas.

Corales Casiano también acusó al alcalde de Guánica se presuntamente recibir sobornos de parte del excontratista Edison Burgos Montes, hallado culpable por narcotráfico y por premeditar el asesinato de Madelyn Semidey Morales, una confidente de la Agencia Federal Antidrogas, crimen por el que podría ser sentenciado a la pena de muerte.

Burgos Montes era propietario de la compañía Burgos Heavy Equipment, dedicada al servicios de transporte de grúas y contratos de construcción.

Por su parte, el alcalde indicó que esa declaración demuestra que las verdaderas víctimas en el caso son él y su familia.

"Allí queda demostrado que lo que nosotros siempre dijimos desde un principio, que aquí los perjudicados fuimos mi esposa, mi hijo menor de 4 años y este servidor. Que fuimos perjudicados y terminamos denunciados nosotros, cuando este señor fue, alteró mi paz, me amenazó con agredirme dondequeira que me cogiera, empleó violencia frente a niños, y esa información la tienen las autoridades", puntualizó en la entrevista radial.

Según el ejecutivo municipal, Corales Casiano tenía un patrón de acecho en su contra. "Dondequiera que me veía, me gritaba y me decía cosas", manifestó.

También dijo que Corales Casiano lo perseguía por el municipio a bordo de una camioneta del Senado.