Lo primero que hizo Emilio Díaz Colón luego que fue designado a dirigir la Policía de Puerto Rico fue reunirse con su equipo de trabajo para hacerle saber que el plan anticrimen que establecerá estará cimentado en el diálogo y el respeto por los derechos civiles.

Así lo aseguró el nuevo superintendente, a 24 horas de su designación, al asegurar que recibió de sus subalternos un buen apoyo y receptividad.

“Me reuní con ellos para que me conocieran, en especial mi forma de trabajar, y les mencioné algunos puntos con los que me gustaría trabajar, como lo es el uso apropiado del uniforme y la cortesía... Estoy seguro que tengo el respaldo de todas las regiones”, manifestó Díaz Colón, quien comentó que recibió acercamientos de Fortaleza el pasado fin de semana para que aceptara el cargo. Esto, al tiempo que el gobernador Luis Fortuño le pedía la renuncia a la Superintendencia a José Figueroa Sancha.

En cuanto a si tiene un plan anticrimen o no y cuándo comenzará a implantarlo, dijo que “no quisiera hacer una predicción de tiempo para luego quedar mal”.

“Quizás de momento las personas esperan que de la noche a la mañana uno pueda traer algo, pero yo no quiero improvisar porque al pueblo hay que respetarlo. Quiero hacer las cosas con firmeza. Poco a poco”, agregó el nuevo jefe de la Uniformada, quien prometió que no hará cambios en el personal de la agencia.

“El que quiera trabajar conmigo va a trabajar conmigo, el que no quiera, ya eso es otra cosa”, sostuvo.

Sobre sus virtudes como líder, dijo que es una persona que cree en el diálogo, que le gusta estar en contacto con la comunidad y que entablará un plan de comunicación entre los 17 mil agentes de la fuerza.

A preguntas de la prensa, indicó que bajo su supervisión espera que no haya confrontaciones o incidentes en los que se han violado los derechos civiles de la ciudadanía, tal como sucedió el año pasado en medio del proceso huelgario de la Universidad de Puerto Rico, el motín ocurrido en el Sheraton y la violenta situación que se vivió en el Capitolio. En todos estos escenarios, miembros de la Policía agredieron a ciudadanos. De hecho, algunos de estos incidentes son investigados por el Departamento de Justicia de EE.UU., agencia que investiga desde 2008 posibles casos de violación de derechos civiles por la Uniformada.

“No estamos para buscar discordia con nadie. Estamos para apoyar y darle seguridad a nuestra gente. Estoy en contra de que se violen los derechos civiles de los ciudadanos. No hay razones...”, dijo Díaz Colón, quien no quiso opinar si en el operativo de corte de luz que llevó a cabo la Autoridad de Energía Eléctrica la semana pasada en la barriada La Perla hubo violación de derechos.

De otra parte, Díaz Colón expresó su interés en que el coronel José Luis Rivera permanezca en la Uniformada y así se lo hizo saber el pasado miércoles en una conversación que tuvieron.

“Hablé con él un largo rato; hablamos bastante. Le pedí que se quedara conmigo y que me ayudara, pero él está evaluando las cosas”, dijo sobre el coronel, a quien catalogó como un hombre “capacitado”, y quien estuvo de superintendente interino durante cinco días, tras la renuncia de José Figueroa Sancha.

Referente a comentarios alusivos a que su desempeño podría mermar por problemas de salud, dijo que no hay por qué preocuparse.

“Quiero que el pueblo sepa que camino una hora, cinco días a la semana, que hago pesas y que me gusta el deporte... Me siento bien, gracias a Dios”, puntualizó el ex general de la Guardia Nacional, quien ha padecido de problemas cardíacos.