La defensa de Félix Verdejo radicó una moción solicitando que se consideren varios factores atenuantes antes de dictar la sentencia por los dos cargos por el homicidio de Keishla Rodríguez Ortiz.

El pasado 28 de julio, un jurado compuesto por nueve varones y tres féminas determinó 12-0 que Verdejo era culpable de secuestro y asesinato de un menor por nacer. El juez federal Pedro Delgado Hernández determinó que el exboxeador será sentenciado el 3 de noviembre a las 2:00 p.m.

Los abogados Jason González y Gabriela Cintrón, reclaman mediante un escrito que Verdejo está sujeto a una cadena perpetua por los dos cargos. Sin embargo, si no es así, presentaron argumentos para que sean considerados al momento de determinar la sentencia.

“Quisiéramos que el Tribunal considere la joven edad de Verdejo, que tiene una hija dependiente de seis años, su carrera como boxeador profesional y olímpico, carencia de un record criminal, carencia de un historial de abusos de sustancias controladas, sus actividades de servicio comunitario, sus excelentes ataduras con la comunidad y las relaciones”, reza el escrito.

Asimismo, la defensa sostiene e insiste en las objeciones que fueron presentadas durante el juicio que se extendió durante 25 días en el Tribunal Federal para el Distrito de Puerto Rico.

La representación legal de Verdejo argumentó que las evidencias y los testimonios no demostraron “más allá de toda duda razonable” que el convicto fue el autor intelectual y, a su vez, partícipe de crimen que ocurrió en abril de 2021.

Los integrantes de un jurado que sufrió múltiples alteraciones en el transcurso del proceso judicial, observó fotos, documentos, vídeos y grabaciones, así como escucharon las declaraciones de peritos, los familiares de la víctima y de Luis Cádiz Martínez, quien se declaró culpable a nivel federal como coasusado del crimen.

El Ministerio Público demostró que Verdejo se confabuló con Luis Cádiz Martínez para terminar con la vida de Rodríguez Ortiz debido a que estaba embazarada y, presuntamente, el expúgil era el padre. Cádiz Martínez fue el principal testigo de que desfiló durante el litigio. Durante el juicio, los fiscales Jonathan Gottfried y Jeanette Collazo convocaron a 31 testigos para apoyar las conjeturas.