La defensa de José Figueroa Agosto, mejor conocido como “Junior Cápsula”, sopesa la posibilidad de radicar una moción que históricamente ha tenido pocas probabilidades de prosperar en la jurisdicción federal: un cambio de tribunal para que el juicio del acusado se celebre en Estados Unidos.

La solicitud se fundamentaría en toda la cobertura noticiosa que ha girado en torno al criminal, el cual ha sido descrito por las autoridades como el más poderoso narcotraficante del Caribe de los últimos 20 años.

El notorio narco compareció ayer ante una vista de lectura formal de acusación presidida por el magistrado federal Bruce McGiverin y lucía de mejor aspecto físico y de buen ánimo en comparación con sus pasadas audiencias en el Tribunal Federal. Se declaró no culpable de los cargos de narcotráfico que enfrenta.

Aunque permanece en una sección de aislamiento de la cárcel federal de Guaynabo, Junior Cápsula sostuvo una larga conversación con una de sus representantes legales, Anita Hill, antes de que comenzara la vista. Pero la audiencia, que duró pocos minutos, terminó con una declaración tajante del magistrado sobre el historial delictivo de Junior Cápsula.

“Su extenso historial de este caso está delineado en el reporte del oficial de probatoria. Entendemos que hay evidencia clara y contundente de que Junior Cápsula representa un peligro para la comunidad y un riesgo de fuga”, indicó el magistrado.

Hill, que había representado a una abogada que se declaró culpable por haber ayudado a Figueroa Agosto a obtener un pasaporte mediante información fraudulenta, sostuvo que,“ciertamente la cobertura no le ha hecho ningún favor a mi cliente, ya que lo han tildado del Pablo Escobar del Caribe”. Se le ha coartado el derecho de un juicio justo e imparcial”, añadió la letrada.