Gucci, Louis Vuitton, Balenciaga. Son de esas marcas que caracterizan la lírica de los artistas urbanos, la vestimenta de la clase social alta y las prendas que muchos desean lucir, al punto de que invierten en piezas falsificadas para, al menos, poder “frontear”.

Incurrir en esta práctica, sin embargo, conlleva un peso mucho mayor de lo que los consumidores se puedan imaginar, pues buscan presumir estas prendas evitando pagar su verdadero precio oneroso. Sepa que comprar productos falsificados podría atentar contra la vida y ser sinónimo a financiar organizaciones criminales altamente peligrosas, habitualmente ligadas al tráfico de armas y drogas, el terrorismo, lavado de dinero y el trabajo forzado de adultos y niños, entre otros crímenes.

“Esa es la parte que está escondida cuando las personas compran un artículo que tiene una violación de propiedad intelectual”, comentó en conferencia de prensa Efraín Rivas, subdirector de Operaciones de Campo para el Comercio de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, en inglés) en San Juan.

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“Ven el precio que es más barato, (el producto) se parece (a lo original), es atractivo, pero esa parte que está atada a todas esas organizaciones criminales, terrorismo, esa es la parte donde nosotros tratamos de traer ese ‘awareness’, esa concienciación, de que no simplemente estás gastando menos dinero, simplemente estás financiando esas organizaciones”, agregó al también señalar que “el hurto de propiedad intelectual amenaza la innovación, la competencia de Estados Unidos, los ingresos de las compañías legítimas y el futuro de las personas que viven en la nación norteamericana”, por lo que pone en riesgo que miles de trabajadores queden desempleados.

Este mensaje cobra relevancia durante la época navideña, pues los agentes reconocieron que al pasar los años la situación fiscal ha vaciado muchos bolsillos e inhabilitado la facilidad de gastar grandes cantidades en regalos, aunque no ha mermado el deseo de hacer regalos lujosos.

“A veces no miramos más allá de los zapatos, los relojes, la cartera, pero lo que hacemos es buscar un precio cómodo para economizarse sus chavitos para comprar más regalos… pero (cuando) usted compró esa camisita, esos zapatos, (está) fortaleciendo esas organizaciones transnacionales criminales. Ahí sufren muchos adultos y niños, que los están explotando en condiciones laborales”, subrayó, por su parte, Yareil Ramos, el agente especial adjunto interino de HSI en San Juan.

“Los criminales saben que los consumidores están buscando esos productos de marca a un precio más cómodo y se están aprovechando sobre esa oportunidad”, añadió.

Son miles las incautaciones que agentes de la CBP y de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, en inglés) efectúan anualmente. Tan reciente como el pasado lunes, se ocuparon 479 camisetas y pantalones deportivos falsificados de una residencia en Guaynabo, que los vendía como si fueron de marcas prestigiosas y originales.

Al cierre de este año fiscal, que transcurrió entre el 1 de octubre de 2022 hasta el 30 de septiembre de 2023, se ejecutaron 1,313 incautaciones. De haber sido productos genuinos, el precio minorista sugerido por el fabricante (MSRP, en inglés) sumaría cerca de $21 millones. A diferencia, se llevaron a cabo 1,377 en un MSRP de más de $36 millones durante el año fiscal de 2022.

La suma de lo incautado por CBP y HSI entre Puerto Rico, las Islas Vírgenes y Estados Unidos fue de 20,812 envíos que contenían bienes que violaban la propiedad intelectual (IPR, en inglés) durante el año fiscal 2022, lo que equivale a casi 25 millones de productos falsificados. El MSRP estimado de estos productos, de ser genuinos, hubiera superado los $2,980 millones. Durante ese año fiscal, se arrestaron 255 personas, se acusaron a 192 y se impusieron 95 condenas relacionadas con delitos e propiedad intelectual.

Aunque suelen ser los más comunes, estos productos falsos no se limitan a joyería, zapatos ni ropa. Sino, los delincuentes fabrican y venden perfumes, juguetes, luces navideñas, equipo electrónico, cascos de bicicleta para niños, medicamentos, desinfectantes, pruebas de COVID-19, piezas para aeronaves y, lo que más atenta contra la vida, piezas de automóviles.

Ramos recordó, además, que en el 2018 tres mujeres y un hombre en Puerto Rico fueron acusados de contrabando, entre otras imputaciones, por vender condones, Viagra y cosméticos falsificados, desde China.

“El asunto se pone un poquito más crítico”, señaló Ramos.” Cuando lo pones a ese nivel, entonces tú te das cuenta lo serio que significa cuándo compras un producto que es substándar”, continuó.

Según especificaron los agentes a Primera Hora, estos delitos normalmente están asociados con el lavado de dinero y el fraude electrónico, cargos que conllevan hasta 20 años de cárcel. Los cargos por violación a derechos de propiedad intelectual podrían llevar hasta 10 años de prisión.

“No le ponga precio a la vida de sus familiares, no le ponga precio a la salud y a su seguridad. Compra los productos genuinos. Tienes que mirar más alá de ese ‘bargain’. Te puede costar la vida”, reiteró Ramos.

¡Denúncialo!

A raíz de los arrestos, los criminales han sido más ingenios a la hora de cometer sus crímenes, aseguró Ramos y Rivas. Para evitar ser detectados, hacen envíos pequeños de productos y venden los artículos en páginas web, que aparentan ser legítimas, y hasta en tiendas.

Por ende, es importante evitar caer víctima de estos criminales. Para esto, debe comprar en tiendas o sitios web de confianza, acreditados y de minoristas autorizados. Para determinar su legitimidad, verifica las reseñas e identifica un número de servicio al cliente y conversa con el empleado.

Si el precio es muy bajo de lo acostumbrado para ese producto, hay una gran posibilidad de que sea falso. Por ende, se debe buscar coherencia en las etiquetas, los paquetes y el contenido de su compra. Asegúrate de que la ortografía esté correcta, que no falten artículos en su orden de compra y que los diseños del producto no sean inusuales.

En las prendas de ropa, enfócate en la calidad. Los estampados deben ser claros, no borrosos, debe estar bien cocido y no tener fibras sueltas. Exige, además, transacciones seguras en el Internet para asegurar sus datos financieros personales.

Si sospechas que uno de tus regalos navideños es falso o si identificas a algún vendedor con artículos falsificados, denúncialo al 787-729-6969 o en la página web de HSI o al Centro Nacional de Coordinación de los Derechos de Propiedad Intelectual.

“Exhortamos a todos los consumidores a que tomen acción para que los delincuentes sepan que no se dejarán engañar al hacer compras falsificadas”, subrayó Ramos.