El juez Nelson Canabal Pérez, del Tribunal de Bayamón, sentenció a cuatro años y un día de cárcel al agresor del periodista radial José Raúl Arriaga.

Al imponer la sentencia contra Luis Miguel Pérez Quiles, de 18 años, el juez manifestó que "nadie le creyó que se estaba defendiendo de una agresión sexual, y no justifica las 21 puñaladas que le dio a este señor".

Agregó que fue “benevolente” al sentenciarlo a las penas mínimas relacionadas a los cargos por los que fue encontrado culpable por un jurado en abril, que fue agresión agravada y Ley de Armas.

Arriaga salió satisfecho con la determinación, ya que la defensa intentó que cumpliera la pena en probatoria, y en especial con las palabras del magistrado.

"Hoy se ve la realidad de las cosas. El informe (pre sentencia) me da la razón porque se trató de pintar que yo era el monstruo que ataque a un niño, lo que yo dije era verdad. Ya debemos cerrar la página, aunque hay otro proceso a seguir. Pero ésta es la verdad. Ahora lo único que pido es que me dejen vivir", expresó Arriaga, quien en octubre enfrentará juicio en el Tribunal de Guayama por imputaciones de agresión sexual contra un adolescente.

En la mañana, el abogado de Pérez Quiles, Federico López Santiago, impugnó el informe pre sentencia que recomendaba cárcel porque el joven no cuenta con un hogar viable para cumplir bajo probatoria.

De hecho, la técnico de servicios socio penales que hizo el informe, Wanda Meléndez, indicó a preguntas del abogado que uno de los posible recursos a donde pudiera vivir es en Alturas de Cibuco, pero allí la mayoría de los vecinos dijeron que el convicto “lo relacionan con drogas, compañía de dudosa reputación, hurto de propiedad y conducta agresiva".

El abogado le preguntó si Hogares Crea pudiese ser una alternativa y Meléndez contesto que si.

Agregó que Pérez Quiles no aceptó los hechos del 7 de septiembre en el sector El Quinto, en Corozal, cuando le propinó 21 puñaladas a Arriaga, por lo que fue encontrado culpable por agresión agravada. En la entrevista Pérez Quiles,  dijo que él se defendió. Su posición es que Arriaga lo iba a agredir sexualmente y él se defendió.

“Él se justificó, pero no hubo arrepentimiento, expresó Meléndez.

A preguntas del fiscal Edmanuel Santiago, la técnico dijo que no pudo entrevistar a la ex pareja del convicto porque su madre no lo permitió. Esto porque lo consideraba "hostil y agresivo" y en un momento dado hubo una petición para una orden de protección.

Cuando entrevistó a Arriaga, éste no estuvo de acuerdo en que cumpla la pena en probatoria.

Pero durante la vista, el juez dejó entrever que la única opción era la cárcel porque "no surge problema de sustancias controladas, hay historial leve, para que no esté en la cárcel, está en  Hogar Crea donde si tiene interés en rehabilitarse, se queda. Sino se va. Es una recomendación que se me hace difícil acoger".

El abogado rogo "misericordia al tribunal" y pidió que no lo enviara directo a la cárcel para que "pueda demostrar que puede seguir pa' lante... O se guinda en la cárcel, o lo guindan o sale un monstruo de la cárcel".

El fiscal catalogó como "alarmante" el patrón de agresividad presentado en el informe, por lo que "tiene que saber que sus acciones tienen unas consecuencias legales... No podemos apelar todos los días en este país al ay bendito".