El balneario de Punta Salinas en Toa Baja fue el escenario hoy de una reunión entre el alcalde José “Betito” Márquez y el comisionado del Negociado de la Policía, Antonio López Figueroa, para delinear planes futuros entorno al desarrollo de un predio de unas 100 cuerdas de zona boscosa, que en el pasado ha sido utilizado como pasillo para el desembarco de inmigrantes y de cargamentos de drogas a la isla.

Ambos funcionarios negaron que el encuentro se relacionara con el enfrentamiento entre agentes y presuntos miembros de una organización criminal de Cataño ocurrido el domingo pasado en ese sector playero, que dejó el saldo de dos muertos, entre ellos un adolescente de 16 años, que ha generado planes de venganza en el bajo mundo y amenazas sobre los alegados planes para la matanza de policías.

Estos sucesos fueron calificados por el alcalde como atípicos, ya que reconoce que se viven tiempos no solo en Toa Baja, sino en todo Puerto Rico, en el que los ciudadanos se encuentran a la merced de delincuentes porque no hay hora ni lugar seguros al momento en el que cometen indiscriminadamente los actos de violencia, por lo que considera hay que crear las estrategias para lidiar con la criminalidad desde sus raíces desarrollando una conciencia colectiva entre las comunidades.

El ejecutivo municipal, aclaró que se delinearán planes para que la comunidad vaya recuperando el área ya que desde agosto asumirá la administración del balneario, aunque la custodia de la titularidad la retiene el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), pero requiere que la ley y el orden impere para que los visitantes se sientan seguros en ese entorno.

Planifica coordinar con grupos comunitarios y organizaciones sin fines de lucro la creación de veredas, zonas de acampar, para ejercitarse y practicar deportes acuáticos, entre otras actividades. Mañana inician las reuniones de los comités de transición para no alterar el sistema establecido en medio del verano y ya para agosto se tomarían las riendas.

“Coincide con este incidente que se dio el domingo, pero en conclusión el elemento más importante era mi preocupación presentada hace algún tiempo atrás al comisionado López, en términos que la administración del balneario va a pasar a manos del municipio y dentro de ese contexto este es un bosque de 100 cuerdas y hay unas áreas por donde han entrado cargamentos de drogas, han entrado indocumentados, hay otras áreas del bosque por donde se generan distintos tipos de fechorías y que en términos de la transición me interesaba entrar en un plan articulado entre la policía estatal y la policía municipal para ir ordenando lo que vamos a estar haciendo”, sostuvo el alcalde de Toa Baja.

Resaltó el hecho de que lo que dio origen a la investigación el domingo fue una confidencia de un ciudadano, las cuales son contribuciones que tienen que continuar ya que la responsabilidad de la calidad de vida debe ser de todos y todas, para que sean también parte de la solución.

López Figueroa, añadió que personal de la División de Relaciones con la Comunidad orientará a la ciudadanía a cómo evitar ser víctima de delitos como apropiaciones ilegales o “carjacking”, otras divisiones van a impactar y motivar a jóvenes, reforzar la vigilancia junto a la Policía Municipal y en el monitoreo de cámaras de seguridad una vez se instalen.

“La criminalidad no está fuera de control”

Por su parte, el comisionado afirmó que se encuentran en alerta y corroborando la veracidad de la amenaza surgida durante la noche del 31 de mayo, sobre una reunión de los líderes del callejón Corea en la comunidad Monacillos en Río Piedras, en la que presuntamente el hermano del adolescente de 16 años, que fue muerto por la policía el domingo, identificado como Rafael García Beltrán, alias “Pito”, manifestó que luego de sepultar al menor saldrá a matar a dos policías.

Durante la tarde compareció al CIC de San Juan acompañado por su progenitora y otro familiar para ser entrevistado.

“Damos por cierta la amenaza. A toda amenaza le damos la seriedad que merece. De inmediato se activaron unos grupos de trabajo de investigación... Los policías están seguros y vamos a seguir cumpliendo con nuestra responsabilidad de dar seguridad tanto a mis policías como a la ciudadanía”, sostuvo López Figueroa.

Agregó que, a pesar de la merma de personal están haciendo su trabajo, incluso arriesgando sus vidas, al tiempo que puntualizó “que la criminalidad no está fuera de control”.

A su vez, dio el visto bueno a las iniciativas del gobernador Pedro Pierluisi Urrutia, quien solicitó al Departamento de Seguridad Nacional que se establezca un operativo federal de 120 días de duración para desarticular las organizaciones criminales en la isla, como ocurrió entre el 2012 y 2013.

“Excelente iniciativa por parte del gobernador, estamos trabajando totalmente con las agencias federales, ayer tuvimos una reunión con Joseph González director del FBI y con Wilmer Ocasio, director de los Marshals para ajustar planes de trabajo dirigidos a arrestar a estos individuos que tienen órdenes de arresto y toda la ayuda que venga a la Policía de Puerto Rico es bien recibida y complementa el Plan 100 X 35 que se lleva a cabo desde el año pasado”, aseveró el comisionado.

En el mes de mayo se reportaron incidentes violentos con motivo de la guerra por el control del narcotráfico lideradas, según el NPPR, por Nelson Torres Delgado, alias El Burro, un fugitivo estatal y federal vinculado con tiroteos recientes en Caguas; Delwin “Tuntún” Berríos Navarro que mantiene secuestradas comunidades en Yabucoa, Humacao y el barrio Espino en San Lorenzo y el cabecilla de la organización del residencial Jardines de Cataño, identificado como Edwin Rivera Pérez, alias “Bubu”, quien se cree que está fuera de Puerto Rico y era la pareja de la “influencer” Isadora Marie Nieves Cruz, conocida como “Pinky Curvy”, quien fue asesinada en la avenida Franklin D. Roosevelt mientras transitaba como pasajera en su guagua marca Toyota Tacoma gris, en octubre de 2020 y no hay orden de arresto contra él.