Uno de los casos más recientes de carjacking en la Isla ha tomado un nuevo rumbo en los tribunales cuando esta semana encontraron causa para arresto contra los dos sospechosos de asesinar a la joven Francheska Limar Jiménez, de 22 años, en Humacao el pasado 19 de octubre.

La teoría de las autoridades es que el dúo de sospechosos simplemente eligió su víctima al azar. Pero, ¿sabemos realmente cómo protegernos ante personas con malas intenciones que quieren arrebatarnos el auto y que, además, podrían quitarnos la vida? ¿Se puede evitar un carjacking? Con esas preguntas en mente, Primera Hora consultó a un agente de la División de Robos del CIC de San Juan y a un detective privado para que nos dieran algunos consejos.

El policía Juan Carlos Rodríguez y el detective Fernando Fernández de la compañía Covert Intelligence coincidieron en que la mayoría de estos actos se comenten como secuela de otro robo y los criminales necesitan escapar de inmediato, por lo que deciden apoderarse del primer carro que encuentran. 

Aunque ya no es tan común, a veces también se roban autos para obtener y vender ciertas piezas en el mercado negro. Otra modalidad es la del carjacking-secuestro para llevar las personas a los cajeros automáticos. Por lo tanto, muchas veces se trata de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado.  Sin embargo, sí hay varias cosas que se pueden hacer para tratar de minimizar las probabilidades. 

Cualquiera que sea la motivación, el primer consejo es estar atentos, especialmente en esos segundos antes de montarse en el vehículo, al detenerse en un cruce o luz roja y al bajarse.

Al momento de montarse en el vehículo

“Hay que mirar a todos lados, siempre, y estar pendiente. Si vas hablando por el celular o distraído con tus pensamientos o preocupaciones, no vas a estar alerta y estás más vulnerable”, dijo Rodríguez.

Fernández, por su parte, indicó que hay que mirar el asiento de atrás y verificar que no haya nadie escondido allí, porque pueden romper un cristal o abrir el carro y entrar. Asimismo dijo que se deben tener las llaves listas para montarse de inmediato al carro y poner los seguros.

“Una cosa que yo hago con mi familia y lo tenemos bien, bien practicado, es el ejercicio de montarnos todos a la vez en menos de 30 segundos. Lo hacemos casi como un juego pero a la misma vez estamos protegiéndonos”, afirmó, al tiempo en que recomendó salir rápido del lugar en vez de quedarte en el auto hablando por teléfono, buscando cosas o maquillándote.

Según el agente, es “clásico” ver a una persona recostada de alguna pared supuestamente jugando con su celular, pero en realidad está velando la güira por si puede robarte. Eso pasa en apenas segundos y por eso hay que velar que no haya nadie sospechoso cercano.

El detective recordó, incluso, que la mayoría de los beepers de los carros hoy en día tienen “botón de pánico”. Si la oportunidad lo permite apriétalo y grita para tratar de alejar a la persona.

Mantén la distancia en las luces rojas

Al estar detenido en las luces rojas se comete el error de pegarse mucho al carro de al frente, pero ambos consultados recomendaron dejar distancia prudente para que puedas maniobrar si ves malas intenciones o alguien viene hacia ti.

Si alguien te da un cantazo por detrás, antes de bajarte mira por el retrovisor y si notas algo sospechoso o la intuición te manda un aviso,  sigue tu marcha. Si es un lugar oscuro, hazle señales al otro conductor de que se pare en otro lugar. Si la persona tiene buenas intenciones lo más seguro te hará caso. 

Atentos en los estacionamientos

Si estás en un estacionamiento y hay un vehículo muy pegado al tuyo con alguien en su interior, no te montes solo. Mejor regresa al lugar donde estabas y pídele a alguien que te acompañe. No estaciones en lugares solitarios o muy oscuros porque eso impide que puedas detectar a tiempo a algún sospechoso.

Si se te aceran individuos armados y tú no estás dentro del carro, “una alternativa es tirarle las llaves bien lejos, gritar como degenerado y correr; no se las des, las tiras y corres….es poco probable que la persona te dispare”, indicó Fernández.

Si te sorprendieron desprevenido, lo más importante es tratar de recordar algún rasgo físico o tatuaje del asaltante. Algún acento o particularidad en el hablar, estatura, color de piel, si tiene pantallas, si camina de forma diferente, o si le falta un dedo o un diente, son detalles que también pueden ayudar a que más tarde puedas identificar a la persona.

Los dos expertos coincidieron en que para hacer esto hay que ser lo más disimulado posible y que el atacante no se dé cuenta de que lo has observado.

“No puedes ponerte a hacer fuerza, trata de mantener la calma y sin poner tu vida en riesgo trata de retener todos los detalles”, dijo Rodríguez.  

Otro aspecto es cooperar, resistir lo menos posible. Si te piden montarte, hazlo.

“Como no sabes si la persona tiene un arma de verdad o de juguete y no te vas a poner a averiguarlo, lo mejor es que trates de que te dejen ir y se lleven el carro”, dijo Rodríguez. 

La única excepción es que haya un niño o alguna otra persona en el auto. En ese caso debes repetir reiteradamente que dejen salir a esa persona y tratar de convencer al asaltante.

Si te secuestran, debes tratar de recordar la ruta que tomaron, ver los rótulos de los lugares si es que te llevan a una zona que no conoces.

Usa el sentido común

Fernández y Rodríguez opinan diferente sobre si se debe intentar salir del auto. Aunque cada caso es bien particular y va a depender de cuán nervioso esté la persona y las condiciones a tu alrededor, lo mejor es usar el sentido común.

Si te llevan a un cajero automático, saca el dinero que te pidan.

¿Es bueno hablarle al pillo? Sí. En eso ambos coincidieron. Y es que muchas de estas personas están pasando por sus propias situaciones difíciles y si los escuchas pueden mostrar algo de compasión y no atacarte. Además puedes tratar de “ablandarlos” diciéndoles que tienes familia y unos hijos que te esperan o que estás enfermo, cualquier cosa que los haga no querer hacerte daño.

Regresando a tu carro, que es el momento más difícil, se debe mirar dentro del vehículo, quizás te rompieron un cristal o lo abrieron y están escondidos detrás del mismo. 

No está de más pepper spray, si vas a pelear para atrás con el que te va a hacer el carjacking trata de que sea en vehículo en movimiento cuando esté en 20 millas por horas. Trata de tener acceso a la puerta en caso de que la persona esté distraída. 

Si están parados en un semáforo y ves al secuestrador distraído puedes abrir la puerta y tirarte. Para eso evalúa bien primero si es conveniente y hazte una bolita como para rodar. Ojo que no venga otro carro  detrás y te atropelle.

Si te meten en el baúl, busca una pestañita color roja que la mayoría de los carros tiene actualmente, y cuando el auto no vaya muy rápido la halas y trata de salir corriendo. También puedes patear los focos y tratar de tumbarlos que desde adentro se puede hacer y por allí sacas una mano o un pie para que te vean. El que conduce es poco probable que se de cuenta. 

Prepara un “código de estrés”

Fernández recomendó también tener un “código de estrés”( Duress Code). Se trata de una frase que sólo tu familia sepa y que únicamente se vaya a usar en caso de una emergencia real. Así, si estás en medio de un carjacking-secuestro y te llaman puedes tratar de convencer al maleante que debes contestar o sería peor. Entonces dices la frase que puede ser algo así como, “no olvides darle comida al gato”. También puedes decirle a la persona que te está robando que debes avisar que llegarás tarde para no levantar sospechas y aprovechar para decirle la frase a tu familiar.

“Puedes tener varios códigos, dependiendo de la gravedad. Lo importante es que el código, cuando estás en peligro inminente, que se oiga como algo habitual y pase desapercibido para que el otro no sospeche qué estás diciendo. No vayas a decir ‘código rojo’. Otra cosa importante: no vaciles con el código, nunca lo cojas a broma porque cuando sea de verdad te tienen que creer”, expresó el detective.

Y si puedes activa el sistema de ubicación (GPS) de tu celular, para que te puedan localizar.

Ante todo hay que estar atentos, mantener la calma y usar el sentido común.