El Negociado del Cuerpo de Bomberos de Puerto Rico ha atendido este año 275 incidentes por escapes de gas en la isla, una cantidad que no es significativamente mayor a la de otros años, pero que ha acaparado la atención pública luego de varios eventos en los últimos cinco días.

El viernes pasado, una potente explosión en una residencia de la urbanización Mansiones de los Artesanos en Las Piedras, le arrebató la vida a un matrimonio. Mientras que el domingo, un evento similar ocurrió en una casa en San Lorenzo, dejando herido de gravedad a un octogenario. Y hoy otras dos situaciones, en Yabucoa y Aguadilla, dejaron el saldo de tres personas con quemaduras, de cuidado.

“En lo que va de año, se han registrado 275 situaciones que se han atendido. Siempre Bomberos las está atendiendo día a día. Puede que en algunos casos haya algunos heridos, en Las Piedras ya todos saben qué sucedió... ha habido diferentes casos, diferentes situaciones, uno un poco mayores como es el caso de Las Piedras, que todavía está bajo investigación. No son situaciones nuevas, solo que ahora se están atendiendo más por lo de Las Piedras, pero son situaciones que ya Bomberos ha estado manejando anteriormente”, sostuvo el subdirector del Negociado de Prevención de Incendios, East Pagán.

Las víctimas de la explosión en Las Piedras fueron Eliezerth M. Seda, un veterano de la Marina del Ejército de Estados Unidos, quien falleció en la escena y su esposa, Janine Goldthrope, de 57 años, quien resultó con quemaduras en un 85% del cuerpo, que le ocasionaron la muerte este lunes, en el Centro Médico, en Río Piedras.

Aunque se presume que la tragedia fue ocasionada por un escape de gas, todavía la agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, en inglés) no ha concluido la investigación.

El funcionario orientó a la ciudadanía para que las instalaciones de gas en sus residencias sean hechas por una compañía que tenga su personal certificado y debidamente entrenado.

Además, recomendó la inspección de las tuberías anualmente, tratar de tener un extintor cerca, delinear un plan de emergencia para el desalojo de la residencia y si va a realizar alguna instalación eléctrica que se contrate a un perito.

“Muchas de estas situaciones surgen por instalaciones mal hechas o por algún tipo de descuido u olvido, porque en instalaciones bien hechas yo podría decir que no surgen situaciones de escape de gas ni deflagración, que son explosiones pequeñas cuando se extiende el gas, pero en instalaciones bien hechas por la gente, se supone que no se vean ese tipo de situaciones. Casi siempre son en residencias o en comercios donde se maneja o se instala de forma incorrecta”, detalló Pagán.

Recordó que la línea tiene de ser de cobre, la cual se utiliza en la mayoría de las instalaciones, o tubería de acero, y se permite que se usen líneas flexibles exclusivamente para gas de la instalación de la válvula de la pared al equipo, en un tramo pequeño en caso de que se tenga que mover el equipo.

Durante el día de hoy un septuagenario sufrió quemaduras de primer y tercer grado en el 39% del cuerpo por el estallido de una estufa de gas por una fuga en la línea de goma en su residencia, localizada en el sector Vivita del barrio Playita Arriba, en Yabucoa.

Los hechos ocurrieron a las 5:23 a.m., cuando Carmelo Delgado Pagán, de 76 años, prendió la estufa que tenía en la terraza de la parte posterior de la vivienda para preparar café y surgió una explosión e incendio.

Más tarde, a las 11:00 a.m., el dueño y un empleado de la panadería El Prado Bakery, ubicada en la urbanización El Prado barrio Borinquen, en Aguadilla, resultaron con quemaduras debido a una explosión en el horno.

De acuerdo con la pesquisa, el propietario -identificado como Joel González Aponte, de 40 años-, dejó la llave de gas abierta mientras se disponía a encender el horno y, al parecer, se acumularon los gases lo que ocasionó una explosión resultando con quemaduras de segundo grado en un 29% del cuerpo.

Al empleado Axel Surillo le diagnosticaron quemaduras de segundo grado en el 10% del cuerpo.

Durante la tarde del domingo, Santos Hernández Aponte, de 87 años, resultó con quemaduras en el 70% del cuerpo, y su esposa Rosa González Medina, de 85 años, se intoxicó por inhalación de humo por una explosión en el tanque de gas de una secadora en una residencia en la Urbanización Luis Muñoz Marín, en San Lorenzo.

La División de Explosivos y Seguridad Pública había atendido hasta el 31 de octubre, 178 incendios que incluyen a vehículos de motor, propiedad mueble e inmueble y casos por escapes de gas.

Para cualquier consulta al respecto, puede llamar a la Oficina de Prevención de Incendios al (787) 725-3434.