La representación legal de la madre de un niño de ocho años de edad presuntamente agredido sexualmente por otro menor mientras estaban recibiendo servicios en el San Jorge Children’s Hospital, en San Juan, confirmó anoche que están considerando tomar acción contra la institución hospitalaria. 

Así lo confirmó la abogada Mariana Nogales luego de que ayer trascendiera que las autoridades investigan la alegación de agresión sexual al menor de edad, ocurrida durante la mañana del jueves mientras este recibía la asistencia en el lugar, según el informe preliminar de la Policía. Ese documento especifica  que el  hospital alertó a la Policía del alegado incidente de agresión sexual a las 9:10 de la noche del jueves. 

El comandante Luis Pabón, director del Centro de Investigaciones Criminales (CIC) de San Juan, indicó a Primera Hora que durante la tarde de ayer estaban en el “trámite de corroborar toda la información”.

Uno de los puntos de interés en la pesquisa es determinar si hay algún tipo de negligencia, “de cualquier persona, no podemos descartar nada”, indicó.

El caso es consultado con el Departamento de Justicia y el Procurador de Menores.

Según la teniente Pelegrina Marrero, directora de la División de Investigaciones de Delitos Sexuales y Maltrato de Menores de San Juan, la investigación preliminar apunta a que la alegada agresión fue por parte de otro menor de edad -entre 12 y 14 años- que también era paciente.

“Quien era responsable de la seguridad de los menores, es el hospital. El área donde estaban solo tiene acceso el personal del hospital”, dijo Marrero temprano en la mañana de ayer a este medio. “(Uno reacciona) un poco sorprendido. Es algo que uno no espera que ocurra”, añadió.

Marrero indicó que una de las personas entrevistadas es el profesional de trabajo social  del hospital que atendió el caso.

Habla la madre

La madre del menor de edad de ocho años, identificada como Lumarie Pérez, llegó ayer hasta las instalaciones del hospital en Santurce donde le expresó llorando a los medios de comunicación que “eso no le debe pasar a ningún niño y menos en un hospital”.

Agregó que “me quedo pasmada, en shock”, porque “se supone que estoy poniendo la confianza, pues en el hospital”.

Al menor -quien su madre aún no había visto, al menos hasta las 7:00 de la noche de ayer, según Nogales- se le estaban haciendo las pruebas pertinentes que ayudarían  a confirmar la agresión, confirmó Pabón.  

Al cierre de esta edición, se desconocía si las autoridades tomarían alguna acción judicial por este caso. 

Por su parte, el hospital expresó en una breve comunicación escrita que “medios de comunicación reportaron que alegadamente ocurrió una situación de agresión sexual en nuestra institución. Por Ley HIPAA y confidencialidad, no podemos ofrecer información de ningún paciente, para proteger la privacidad de los mismos”.

También informó que “en San Jorge Children’s Hospital proveemos servicios únicos en Puerto Rico para la población pediátrica. Contamos con la facultad más completa, con más de 30 años de experiencia. Acreditados por la Joint Commission, somos el único hospital pediátrico que tiene la mayoría de las sub-especialidades pediátricas en un mismo lugar”.

Primera Hora le hizo otras preguntas no relacionadas con los pacientes, pero no respondieron.

Maltrato institucional

De otro lado, el subadministrador de la Administración de Familias y Niños (Adfan), Carlos Rivera, dijo a Primera Hora que investigan un alegado  maltrato institucional. “Ahora lo que tenemos son unas alegaciones”, precisó Rivera. 

Indicó que la alegación está bajo investigación, según el debido proceso de ley para todas las partes: menores, familiares y hospital. “Si esto ocurrió, que se tomen las medidas para garantizar que esto no vuelva a ocurrir”, dijo.

Precisó que Familia se enteró por un referido de un trabajador social del hospital sobre “maltrato intrafamiliar”. Pero eventualmente el asunto cambió al ángulo de maltrato institucional. 

“Nos damos cuenta de una situación con un niño alegadamente recibiendo tratamiento en un hospital, admitido. Ahí se procede a darle otra mirada a la investigación, de alegado maltrato institucional porque se da dentro de una institución hospitalaria”, subrayó Rivera. 

A Familia le corresponde investigar el alegado maltrato institucional porque estaba admitido y los custodios del menor “no estaban en la institución”.

“En este caso se alega que los menores estaban admitidos pero bajo la custodia del hospital. Al estar bajo la custodia del hospital, la responsabilidad es del hospital, si las alegaciones se confirman”, dijo Rivera.

Explicó que de la información salir con fundamento, hay que trabajar un “plan de acción correctivo” para ver las causas y corregir las deficiencias que se pudieron encontrar durante el proceso de investigación. El plan de acción podría durar entre tres a seis meses. También dijo que Familia no ha tenido contacto con los menores de edad “porque el hospital lleva a cabo un proceso de evaluación”. Ayer los dos menores permanecían en el hospital, dijo.

En cuanto a si alguna de las dos familias tenía algún caso en el departamento, optó por no responder, porque “eso es información en la que no debería entrar”.