Comunicaciones por la aplicación de WhatsApp y Telegram fueron reveladoras para conocer cómo se fraguó el presunto esquema de soborno, conspiración y fraude electrónico con el que se conseguiría apoyo monetario para la campaña que realizaba la exgobernadora Wanda Vázquez Garced en contra de Pedro Pierluisi en el 2020 y que le ganaron una acusación federal.

En estas comunicaciones sobre todo se destaca el activismo que presentaron dos de los testigos con los que contaría la Fiscalía federal y que se declararon culpables relacionado a este esquema, el que fuera asesor de la campaña John Blakeman Ortiz y Frances Díaz Fossé, expresidenta de Bancrédito International Bank & Trust Corporation.

También salen a relucir los nombres de los otros coacusados en este caso de corrupción pública, el propietario del banco, Julio Herreta Velutini, así como el exagente del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) y asesor de Herrera Velutini, Mark Rossini.

Entre los detalles que se revelaron se establece que se le dieron a la exgobernadora boletos de primera fila para el concierto de “Marc” y hasta entrada preferencial para conocerlo en el camerino, así como una asistencia como invitada especial a la boda del millonario inversionista Fahad Ghaffar, en Río Grande, a quien se le identifica en el pliego acusatorio como el “Individuo C”. Reuniones en cuartos privados del hotel Vanderbilt y en una residencia de Vázquez Garced en Montahiedra también son objetos de las reveladoras comunicaciones que la Fiscalía federal presentó en un documento legal identificado como “Designación de Evidencia”.

Entre los aspectos importantes, se destaca que las conversaciones entre las partes para fraguar el esquema corrupto iniciaron a principios de diciembre de 2019 y que su foco era “usar un aplanador sobre OCIF (Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras) y construir una nueva estructura que regule y no persiga a los bancos y cambie documentos o fabrique documentos contra los bancos”, surge de un mensaje emitido el 15 de diciembre de 2019 entre Herrera Velutini y Díaz Fossé.

Según la acusación de la Fiscalía federal, Herrera Velutini y Rossini, presuntamente, le prometieron apoyo financiero a la exgobernadora para su campaña política del 2020, a cambio de que ella utilizara su influencia política para destituir y remplazar al entonces comisionado de la OCIF, George Joyner Kelly, pues el organismo regulador realizaba una investigación en contra de Bancrédito.

En febrero de 2020, Joyner Kelly presentó su renuncia, alegadamente, bajo presiones. La exgobernadora nombró como su remplazo a Víctor Rodríguez Bonilla, quien se alega había sido recomendado por Herrera Velutini para que asumiera la dirección de OCIF. Supuestamente, la exgobernadora recibió un soborno de $300,000 por facilitar esa gestión de cambio de mando en OCIF.

Como parte de organizar el esquema se destacaron del equipo de la exgobernadora a Blakeman Ortiz; la que fuera su subsecretaria de la gobernación e “Individuo A” en la acusación”, Lillian Sánchez Pérez, y su ayudante e “Individuo B en la acusación, Marisol Blasco Montaña.

El liderazgo de Ghaffar

Surge que las primeras comunicaciones reveladas por la Fiscalía que la primera movida para entablar un acuerdo de un presunto beneficio mutuo surgieron de parte de Ghaffar hacia el equipo de Vázquez Garced. Ese primer contacto, ocurrido el 2 de diciembre de 2019, se realizó con la exsubsecretaria de la gobernación, quien no fue acusada por los federales en este esquema.

Cabe destacar que en estas comunicaciones se habla de que supuestamente Vázquez Garced hizo o mencionó hacer, pero no surge un mensaje específico en que ella misma diera instrucciones o estableciera ser parte del acuerdo. Mientras, sólo se da cuenta de mensajes que surgieron entre Ghaffar y ella, pero en los mismos no se habla de que hubiese un acuerdo con Herrera Velutini a cambio de dinero para su campaña.

El hilo de comunicaciones revelado apunta a que el supuesto primer contacto de la exgobernadora con el que se alega le daría el dinero para la campaña, Herrera Velutini, ocurriría en la boda de Ghaffar. Pero, previo al evento, el banquero envió un mensaje a Blakeman Ortiz para dejarle claro que Vázquez Garced tendría que “resolver lo de OCIF” y que, a cambio, le darían “apoyo” para que prevaleciera en las primarias del Partido Nuevo Progresista.

Ya en la boda del inversionista, que ocurrió el 5 de enero de 2020, se le había anticipado a la exgobernadora que estaría sentada con tres “billonarios”, surge de las comunicaciones.

Sin embargo, Vázquez Garced y su esposo, el exjuez Jorge Díaz Reverón, se la pasaron bailando en el festejo. Se indicó en un mensaje entre Herrera Velutini y Díaz Fossé que, por tal razón, no pudieron conversar.

La revelación de la Fiscalía federal establece que Herrera Velutini no pudo hablar, porque “no quería ser recordado como el idiota que le arruinó la noche a ella (la exgobernadora) y a su marido”. Por lo que, el banquero esperaría una reunión que se realizaría a 10 días de la boda. Específicamente, el encuentro fue pautado para el 14 de enero de 2020.

Ese día de la reunión, Herrera Velutini escribió un mensaje a Díaz Fossé para indicarle que “la solución es despedir a la persona que tiene a OCIF secuestrada y colocar a un comisionado interino que haga una reforma”, reveló la Fiscalía federal.

En otro mensaje registrado entre Ghaffar y la exsubsecretaria a la gobernación ese mismo día de la reunión con Vázquez Garced se dio a conocer que el encuentro “fue genial” y que Herrera Velutini le daría “el apoyo”. Para confirmar su apreciación, Ghaffar le envió un pantallazo de la comunicación que había tenido con el banquero en la que supuestamente se veía cómo este establecía que estaba “listo para apoyarla”.

En otro mensaje de correo electrónico el día después del primer encuentro, se establece cómo Herrera Velutini pagaría por el trabajo de asesoría que tendría que hacer la firma de Rossini, International Consulting Firm, para la campaña de Vázquez Garced y que también se crearía un comité de acción política (PAC).

“Julio H. pagará personalmente cualquier cosa que no sea cubierto por la compaña o el PAC”, se indica. Poco después, se revela que Herrera Velutini estaría pagando $500,000 a la mencionada firma por el trabajo a la campaña.

Comunicaciones posteriores entre los involucrados apuntan a que Vázquez Garced estaba trabajando lo de OCIF y cómo el personal asociado a la exgobernadora le preguntaban a Herrera Velutini a quién se debía asignar en el cargo. En medio de estas conversaciones, trascendió que el banquero le consiguió a la exgobernadora una entrevista con Diario Las Américas.

También se hablaron de supuestas presiones de Blakeman Ortiz a sus ayudantes de La Fortaleza para que la exgobernadora acabara de despedir al comisionado de OCIF, porque Herrera Velutini ya estaba invirtiendo mucho dinero. Poco después ocurrió una comunicación en la que se establece que la salida de Joyner Kelly se concretaría el 27 de febrero de 2020.

Tras conocerse el dato, el banquero supuestamente comenzó a enviar a su equipo y a los involucrados del grupo de la exgobernadora “la propuesta de apoyo a la campaña”. No surge que la misma le haya llegado directamente a Vázquez Garced. Tampoco se dieron detallas de lo que contenía ese documento.

La salida del comisionado se dio finalmente el 28 de febrero. Ese mismo día, supuestamente Herrera Velutini y Vázquez Garced se reunieron en el hotel Vanderbilt.

El banquero le había adelantado en un mensaje a Blakeman Ortiz que necesitaba un aparte con la exgobernadora para conversar sólo sobre OCIF. Mientras, un día después ya este hablaba en sus comunicaciones por Whatsapp de las medidas que tomaba para la creación del PAC. Surge también que buscarían el apoyo de un asesor político, que resultó ser M. Dane Waters, para colaborar en la campaña a la reelección.

De las comunicaciones trasciende que, una vez ya ocurrió el cambio de OCIF, Ghaffar envió a Vázquez Garced los supuestos planes que habían alcanzado para su campaña electoral. Además, envió la primera encuesta que realizaron para medir a la exgobernadora contra Pierluisi. Presuntamente, esta le contestó que los números se “ven bien” y se quejó con este del apoyo que los medios de comunicación le daban a su contrincante. Esto ocurrió para el 9 de abril de 2020.

Mientras, para el 18 de abril el banquero informó a Blakeman Ortiz que ya el superPAC para apoyar a Vázquez Garced había sido creado. Para accionar el PAC, Rossini pidió la salida del director de campaña, Jorge Davila, y anticipaba que se iban a realizar anuncios a su favor.

Fue para principios de mayo que Herrera Veluntini comenzó a hablar de la persona que iría a OCIF. Este finalmente fue nombrado el 14 de mayo de 2020, según expone la Fiscalía al concluir los mensajes que forman parte de su prueba.

En general, los fiscales establecieron que la prueba se encontró a través de la ocupación de los celulares, cuentas personales en aplicaciones como Yahoo, Apple y Google o correos electrónicos de Blakeman Ortiz, Díaz Fossé, Sánchez Pérez, Blasco Montaña, Rossini, Vázquez Garced, Herrera Velutini, Ghaffar y el consultor político, así como fotos y el reportaje del Diario Las Américas, entre otros.