Informes de la policía indicaron que dos personas fueron amordazadas y tomadas de rehenes durante un asalto ocurrido a las 11:00 a.m. en el negocio Mudafort Extreme Sport localizado en la avenida Ponce de León intersección con la avenida Fernández Campos en Santurce.

Según el agente Emilio Rosario, director de la región de San Juan de la Policía de Puerto Rico, en horas de la mañana tres individiuos entraron a asaltar la tienda y amarraron al propietario Roberto Maldonado y a otro empleado en el sótano del lugar.

Sin embargo, a más de tres horas del incidente la policía informó que no pueden confirmar si en efecto hay rehenes.

Al llegar un agente de la policía al área, surgió un intercambio de disparos entre los asaltantes y el oficial. En ese momento, el empleado y el dueño lograron salir de la tienda, uno de los asaltantes huyó corriendo y los otros dos quedaron dentro de la tienda portando armas de fuego.

La tienda se dedica a la venta de artículos para deportes extremos y de armas de fuego.

"Ahora mismo estamos en negociación para persuadirlos y lograr que desistan de utilizar sus armas", expresó Hilton Cordero, comisionado de seguridad de la Capital en relación a los sospechosos.

Al momento el negociador de la policía, Octavio Cruz, intenta establecer comunicación con los asaltantes, pero no se descarta la intervención de la unidad de Swatt si fuera necesario. De hecho, ya se encuentran agentes del SWAT y francotiradores enmascarados en la escena.

Las autoridades también gestionaban cortarle el servicio eléctrico al edificio para presionar a los asaltantes.

"Yo solamente quiero ver a mi hijo, quiero saber que está bien", dijo Roberto Maldonado, padre  del propietario de la tienda, quien llegó hasta el lugar al enterarse del asalto por los medios.

Se informó que Maldondado recibió asistencia médica dentro del banco RG-Premier por una herida ocasionada por un golpe con la culata de un arma de fuego.

Sacan a los testigos del área

Varios de los testigos, incluyendo al herido, fueron sacados de área en vehículos oficiales de la policía. Se pudo observar al propietario de la tienda con un vendaje en la cabeza y a otras dos personas que se tapaban el rostro con sus camisas.

Mientras, la policía evaluaba cortar el servicio de agua del local ya que no han logrado establecer comunicación con los asaltantes que no contestan el teléfono de la tienda.

A la 1:35 de la tarde, el  negociador Octavio Cruz comenzó a comunicarse mediante un megáfono con los sujetos. "'Mi nombre es Octavio y deseo buscar una solución a este problema... el teléfono debe estar sonando en este momento, por favor cójanlo o de lo contrario puedes comunicarte conmigo a este teléfono", dijo el agente al proveerle un número de celular.

"Necesitamos que se comuniquen y que me digan en qué posición están, si necesitan ayuda o si hay alguien herido", dijo al solicitarle que le dieran un número dónde llamarlos. "Sin comunicación no podemos resolver esto, o de lo contrario tenemos que utilizar la fuerza", advirtió

Agentes de la unidad Swatt rodean el área y hay francotiradores apostados en los techos de los edificios aledaños a la tienda en el área de Santurce.

A eso de las 3:20 de la tarde, la Policía llevó al lugar un robot con la intensión de introducirlo en el piso principal del local para ver si en efecto hay alguien allí adentro.

A las 3:45 de la tarde, el negociador dio la orden para meter el robot en el piso principal del establecimiento, según informó Hilda Rivera oficial de prensa de la Policía. De acuerdo a los visuales que obtenga el robot, se determinará el próximo paso a seguir ya que las autoridades temen que los asaltantes ya hayan salido del edificio.

Cerca de las 4:45 de la tarde, una escuadra compuesta por  nueve hombres armados y fuertemente custodiados entró tanto al área del sótano como al primer y segundo piso del edificio y no encontraron a nadie en el lugar.

Según el agente Emiliano Rosario, todavía queda un piso por verificar.

A las 5:30 de la tarde, sale el robot y varios de los oficiales del edificio. Siguen revisando el tercer piso y buscarán si hay alguna persona encerrada en algún cuarto del lugar. En las afueras del edificio, la lluvia es copiosa y hay truenos y relámpagos.

Como a eso de las 6:20 de la tarde, el oficial Emiliano Rosario dio a conocer a los medios que, aún cuando siguen guardando el perímetro, el panorama indica que no hay nadie dentro del lugar.

Rosario indicó que las siete horas que estuvieron en el lugar, las unidades, y los altos costos operacionales no fueron perdidos porque había que salvaguardar la seguridad de las personas tomando en consideración que este lugar era una armería.