El Negociado de Inteligencia y Arrestos capturó esta tarde al fugitivo Brandon Isiah Ríos Maldonado, de 25 años, contra quien pesaba una orden de arresto expedida por la jueza Marangely Colón, del Tribunal de San Juan, por cargos de manipulación o daño al sistema de supervisión electrónica y daño agravado con una fianza de $1 millón, reveló el inspector José Fontánez, director del Negociado de Inteligencia y Arrestos.

Corroborando confidencias, los agentes de la división de Arecibo, diligenciaban una orden de allanamiento en el apartamento 101 del edificio 11 del residencial Los Murales, en Manatí, cuando arrestaron a Ríos Maldonado junto a otro individuo identificado como Juan Daniel Félix Pagán.

En el apartamento se ocupó una pistola, balas, cocaína y marihuana.

El martes se dio a conocer que se removió el grillete con el que era monitoreado bajo el Sistema de Supervisión Electrónica mientras se encontraba en espera de la continuación del juicio por el crimen de una empresaria en el 2020. Esta es la segunda ocasión que lo hace.

Ríos Maldonado fue acusado junto a otros individuos por cargos de asesinato, tentativa de asesinato, robo agravado, conspiración, secuestro agravado, poner en riesgo a la seguridad u orden público al disparar un arma de fuego, daños agravados, destrucción de evidencia y violación a los artículos 6.05 (portación y uso de armas de fuego sin licencia) y 6.14 (disparar o apuntar armas) de la Ley de Armas, con relación al crimen de la empresaria Rosa Castillo Carranza, de 53 años y vecina de Loíza.

Se encontraba en libertad mediante el recurso de habeas corpus, ya que no fue sometido a un juicio en un período de seis meses, por lo que fue excarcelado y se le colocó el grillete el 20 de diciembre de 2022.

Castillo Carranza, quien tenía un negocio de alquiler de viviendas para turistas en Loíza e Isla Verde, fue secuestrada por varios individuos en calle Mar Mediterráneo de la urbanización Villa Mar en Carolina, quienes la obligaron a abordar una guagua marca Honda que fue hurtada mediante un “carjacking” el 13 de febrero del 2020 en Canóvanas y se llevaron su vehículo marca Mitsubishi Outlander del año 2019, color gris oscuro.

Dos días más tarde, el 19 de marzo de 2020, su cadáver baleado fue hallado a orillas de la carretera PR-31 en el sector Hoyo Frío, en Juncos.

La continuación del juicio está programada para comenzar el 11 de septiembre en la sala del juez Daniel López González del Tribunal de Caguas.

El imputado había arrojado resultados positivos a sustancias controladas en una prueba aleatoria.