Arrepentido.

Así dijo estar Erick Abdiel Pastrana Vázquez mientras era escoltado en la Comandancia de Arecibo luego de haberse entregado a las autoridades y admitir que había asesinado a su abuela.

Durante la madrugada de ayer, Pastrana Vázquez se personó voluntariamente al cuartel municipal de Adjuntas y allí confesó haber asesinado a Hilda Cruz Jiménez, de 68 años, quien fue hallada con un cuchillo en el cuello mientras se encontraba en su residencia del barrio Magueyes, en Barceloneta.

“Él llegó aquí y me indicó que venía a entregarse. Le pregunté por qué y me dijo que había matado a su abuela”, dijo el agente Raymond Valentín Pérez, de la Policía Municipal de Adjuntas.

Al escuchar la admisión del delito, el agente procedió a arrestar a Pastrana Vázquez, quien, según indicó el oficial, no se encontraba en estado de embriaguez o bajo los efectos de sustancias controladas.

“No parecía estar bajo los efectos, pero sí me dijo que se había hecho las necesidades encima. Tenía un olor bien fuerte”, señaló.

Aunque admitió haber asesinado a doña Hilda, quien lo cobijaba en su hogar desde hace seis meses, todavía sigue siendo un misterio el motivo que llevó al individuo, de 29 años de edad, a cometer este crimen.

“Él solamente confesó haber matado a su abuela, pero no dijo el porqué de sus acciones. Lo único que pidió fue hablar con su familia”, sostuvo el agente.

Pastrana Vázquez fue llevado ante la jueza Aida Meléndez Juarbe del Tribunal de Manatí, quien le impuso una fianza de $1.5 millones, la cual no pudo prestar y fue ingresado anoche en la cárcel Guerrero en Aguadilla.

Al hombre se le radicaron cargos por robo agravado, asesinato en primer grado y violación al Artículo 5.05 de la Ley de Armas. La vista preliminar será el próximo 25 de septiembre en el Tribunal de Arecibo.

Poco después del mediodía, llegaron los padres de Pastrana Vázquez y otros familiares para verse por primera vez con el joven. Hablaron con él, pero no pudieron precisar el porqué de sus acciones. 

Primera Hora intentó obtener reacciones de los familiares, pero se encontraban muy afectados por la tragedia que les ha tocado vivir y pidieron espacio para poder lidiar con la situación.