Alertan a ciudadanos para evitar estafa mediante uso de aplicaciones móviles
La División de Crímenes Cibernéticos orienta sobre extorsiones con videos y y fotos íntimas.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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La División de Crímenes Cibernéticos insistió hoy en la importancia de que cada ciudadano proteja su información personal particularmente cuando utiliza las aplicaciones móviles que les permiten videollamadas o socializar vídeos y fotos íntimas para evitar que sean víctimas de esquemas de estafa.
Una de estas querellas que se encuentran bajo investigación fue radicada durante la semana pasada por un ciudadano que conoció a una mujer a través de la aplicación “Tagged” y luego ella le exigía $300 para no difundirle a su lista de contactos las fotos y vídeos íntimos que le había tomado en comunicaciones previas.
Al ver que no le pagó el dinero solicitado, la mujer se comunicó con un compañero de trabajo del afectado y le dijo que ella solo tenía 17 años y que él la estaba acosando.
“Nos preocupa que las personas todavía no están alertas a esta situación. Entre más información la persona exponga en sus redes sociales (es más vulnerable), .... y esa cadena la sustenta el eslabón débil que es el usuario que menos protege su información”, advirtió el sargento Luis Maldonado.
Estos estafadores realizan el trabajo de ingeniería social para extraer sus contactos personales, conocer los lugares que frecuenta, a qué se dedica y cómo andan sus finanzas con el fin de que una vez le hace el acercamiento a través de las redes sociales ya tenga identificadas todas sus áreas vulnerables.
Mucha de esta información se extrae de Facebook y también se utiliza en aplicaciones como Messenger, WhatsApp, Tagged, Badoo y Skype.
Todavía hay numerosas redes sociales y aplicaciones que no exigen la validación del usuario mediante el reconocimiento facial a través de un selfie, lo que les permite la creación de cuentas con fotos e información falsas para crearle la ilusión al incauto de existe un interés real en relacionarse.
Esta modalidad comenzó a detectarse para el año 2016 cuando se reportaron a esa división 140 querellas, en el 2017 los casos disminuyeron a 29, en el 2018 incrementaron a 66 y para el año pasado alcanzaron los 47.
Estas estadísticas no cuentan aquellas querellas que se radican y las cuáles no son referidas a la División, aclaró Maldonado.
“Este tipo de extorsión consiste en que la persona gana su confianza, hace amistad con la persona y logra que la persona le de bastantes detalles de su vida. Estas personas buscan personas, gente que tengan posiciones sociales de prestigio. Por ejemplo, buscan el perfil de un médico, de un empresario, que socialmente es una persona que esté bien económicamente o buscan una persona religiosa que obviamente que esté dispuesta a pagar porque su integridad y su imagen se pueda ver lacerada si sale un vídeo de esa índole (íntimo)”, detalló Maldonado.
En la gran mayoría de estos casos, las víctimas son hombres que conversan a diferentes horas con la mujer a la que están conociendo y cuando entran en conversaciones íntimas acceden a utilizar aplicaciones que permiten vídeo llamadas y desnudarse sin tomar en cuenta que son grabados.
“Le dice a esta persona que se traslade a una aplicación de vídeo, se prende una cámara, hay un vídeo
Por eso es importante que limite lo que usted exponga en línea y cuando vengan personas que uno no conozcan de la nada a hablarle a uno, uno tiene que estar bien cuidadoso.
-Sargento Luis Maldonado
de una mujer que no necesariamente es la misma que está en el perfil, ese es uno de los indicadores. Le sigue la conversación porque ve que la mujer está parcialmente desnuda entonces pues lo induce a que se quite la ropa y empiezan las conversaciones cada vez más íntimas. Cuando logra que muestre sus partes íntimas o se desnude y se ponga en la cámara, la timados no cuentan con que el ‘scammer’ (estafador) lo está grabando para luego decirle ‘se acabó el juego’ y ahora tú me vas a dar tanta cantidad (de dinero)”, explicó.
En ocasiones, los chantajean con decirle a sus contactos y familiares que está teniendo intimidad con menores a cambio de que entreguen dinero.
De los casos que ha visto, le han solicitado hasta $10,000 y luego acceden a rebajar la suma. En otras situaciones, a pesar del pago, igual publican sus vídeos íntimos, contó Maldonado.
Las investigaciones de estos casos han sido cuesta arriba y no se ha radicado ninguno porque en numerosas situaciones el origen de la dirección IP, que es el conjunto de números que identifica la conexión de un dispositivo electrónico, está registrada en Francia, Ámsterdam o España, para no exponer la dirección real.
En la actualidad trabajan una querella en conjunto con la Interpol porque solo en aquellos países donde existen acuerdos de asistencia legal mutua se puede intervenir en busca de rastrear al delincuente, sin contar con las políticas de privacidad del cliente de las compañías de telefonía.
“Es muy importante que lo que usted no quiera que se sepa no lo ponga en Internet porque en algún momento uno no sabe lo que pueda pasar. Por eso es importante que limite lo que usted exponga en línea y cuando vengan personas que uno no conozcan de la nada a hablarle a uno, uno tiene que estar bien cuidadoso. También si sabemos que estamos hablando con una persona que en su perfil se identifica como del extranjero tenga cuidado”, reiteró Maldonado.
En el caso de las mujeres han detectado la modalidad de “Romance Scams" que son hombre que se hacen pasar por militares, en su mayoría y se ganan su confianza mediante atenciones para luego pedirle ayuda para un hijo con necesidades particulares o para misiones de ayuda humanitaria.
Maldonado agregó que en este esquema no se configura el delito de extorsión o estafa ya que la persona accede libre y voluntariamente a donar este dinero.
Si usted es víctima de un esquema similar comuníquese a la división al (787) 793-1234 extensiones 2487 y 2788 ya que le pueden ayudar a mitigar el problema preservando la cuenta, configurando las herramientas disponibles de privacidad y hacer los ajustes para evitar que se continúe viendo su información.