El Ministerio Público radicó hoy cargos de maltrato por negligencia bajo la Ley 246 para la Seguridad, Bienestar y Protección de Menores contra la progenitora de una adolescente con autismo severo que fue sometida a un patrón de abuso sexual agredida por su pareja, quien la embarazó.

La jueza Evyanne Mártir Hernández, del Tribunal de Caguas, determinó causa para arresto contra Ana Castro Leduc de 41 años y le señaló una fianza de $500,000.00 la cual no prestó.

Luego la mujer confrontó problemas con su presión arterial por lo que fue transportada al hospital HIMA en Caguas. Una vez sea dada de alta se procederá a ficharla e ingresarla en prisión.

El sábado, la progenitora de la menor de 13 años junto a su pareja la llevaron a un hospital porque sufría de un fuerte dolor abdominal y allí se descubrió que tenía 32 semanas de embarazo. En ese momento, Carlos Soto Rivera de 49 años, padrastro de la menor, acudió a un cuartel de la Policía, donde confesó que durante tres años había abusado sexualmente de su hijastra, en su hogar en Gurabo.

El comandante Gerardo Oliver, de la superintendencia auxiliar de Investigaciones Criminales, sostuvo que fue denunciada por negligencia porque, según las autoridades, no es posible que no se diera cuenta de que estaba embarazada.

“Ella no se arrestó hasta ayer porque no se podía separar de la menor que se encuentra hospitalizada y ella es quien podía autorizar sus tratamientos. Una vez el Departamento de la Familia tomó su custodia de emergencia fue puesta bajo arresto. Ella tenía que haberse dado cuenta de que estaba en un estado tan avanzado de embarazo, porque ella era hasta quien la bañaba”, indicó Oliver.

La condición de la niña es de cuidado.

La mujer ha negado tener conocimiento de su embarazo al igual que el padre biológico que no la veía con frecuencia.

La vista preliminar fue pautada para el 8 de agosto.

A Soto Rivera se le radicaron cargos ayer por agresión sexual y maltrato de menores y fue encarcelado al no prestar una fianza de $300,000.00 que le fue señalada por el juez Juan De León.

Por su parte, el padre biológico de la menor, Jorge Reyes Aponte, sostuvo que: “yo confío en el señor que todo ellos van a pagar todo lo que han hecho. Yo no puedo tener rencor en mi corazón porque yo soy una persona que va a la iglesia y eso”, tras ser entrevistado por el Departamento de la Familia, reseñó Telenoticias.

El caso se consultó con la fiscal Maribel Mojica.

La mujer fue sometida a una prueba de dopaje en el Instituto de Ciencias Forenses (ICF), porque según el comandante son necesarias para establecer unos sucesos que han surgido durante el transcurso de la investigación.