El enorme reto que enfrenta la Policía de Puerto Rico para imponer orden entre los usuarios que manejan ilegalmente "four tracks" y otros vehículos todoterreno por las vías públicas del país quedó en evidencia la noche del día de Navidad y la madrugada de este jueves, cuando decenas de individuos manejaron este tipo de transporte con total impunidad por carreteras de San Juan, Trujillo Alto y Caguas, pese a estar prohibido.

Este medio tuvo acceso a un vídeo grabado por una persona que capturó a decenas de dueños de "four tracks", junto a motociclistas, manejando estos vehículos de forma temeraria y sin la indumentaria correcta en una caravana por la carretera PR-181, jurisdicción de Trujillo Alto. En el caso de los "four tracks", el uso de estos vehículos está prohibido por ley en vías de rodaje y desde que se aprobara una ley a mediados de noviembre de este año, la Policía está facultada a confiscar estos vehículos.

Según trascendió, el junte de conductores de estos vehículos, que inició la noche del miércoles y culminó por la madrugada, cubrió vías como la avenida Jesús T. Piñero, la avenida Muñoz Rivera, la carretera PR-181 en Trujillo Alto y se extendió hasta la autopista PR-52. Sin embargo, al ser entrevistados por este medio, portavoces de la Policía en las áreas policiacas de Carolina y Caguas indicaron que no se recibieron querellas de ciudadanos sobre esta situación.

En San Juan, la teniente Rosa Sánchez, jefa de la división de Tránsito en la capital, confirmó por mensaje de texto que "ocuparon" dos de estos vehículos, pero que no hubo arrestos. Sánchez no proveyó información adicional sobre dónde y en qué circunstancias la Policía intervino con los dos conductores de los "foutracks" ocupados.

La situación, incluso, pudo haber terminado en tragedia. Una fuente de este medio indicó que a eso de las 11:30 p.m. observó como un enorme grupo de estos individuos invadieron la autopista PR-52 a la altura del peaje Caguas Sur en dirección hacia San Juan, donde también se observaron motoras todoterreno. A la altura del centro comercial Las Catalinas, según narró la persona que prefirió no ser identificada, uno de los ocupantes de uno de los "four tracks" perdió el control y cayó al pavimento, siendo impactado en las piernas por otro de estos vehículos.

De acuerdo al relato, el individuo logró arrastrararse hasta un área verde, donde evitó que un vehículo le atropellara.

Una situación similar ocurrió en la carretera PR-181. En el vídeo al que tuvo acceso este medio, se observa una patrulla cuyo ocupante poco hizo para intervenir.

A preguntas de este medio, el comandante Orlando Rivera, jefe del área policiaca de Carolina, indicó en entrevista telefónica que desconocía que una cantidad exagerada de conductores de "four tracks" hubiera ocupado anoche algunas de las vías en el área policiaca que dirige y que incluye a Trujillo Alto.

 "Me entero ahora que me lo estás diciendo. Tengo oficiales trabajando las 24 horas y cualquier incidente me mantienen informado", dijo. "Hemos tenido planes de trabajo dirigidos hacia los "four tracks" en Trujillo Alto y Carolina. Hemos tenido querellas y las hemos atendido", mencionó al indicar que previo a la firma de la ley que faculta a los Policías a confiscar estos vehículos se evitó que una caravana de "four tracks" se reuniera por la sede de Obras Públicas Municipal en Trujillo Alto. El grupo finalmente se movió hasta Juncos.

Intentos de contactar al comandante Orlando Meléndez, jefe del área policiaca de San Juan, no rindieron frutos.

Entretanto, el inspector Jorge Hernández Peña, coordinador de Asuntos de Tránsito de la Policía de Puerto Rico, refirió el asunto a las áreas policiacas, que tienen jurisdicción directa desde que así lo determinó el exsuperintendente, Héctor Pesquera, sobre las divisiones de Patrulla de Carreteras y los cuarteles de autopistas. Hernández Peña sí pudo confirmar que desde que se aprobó la ley que faculta a la Policía a confiscar estos vehículos se han ocupado 13.

"No era una actividad en sí", dijo Hernández sobre lo ocurrido la noche antes. "(Los conductores) se están ubicando por grupos pequeños en las vías públicas sin anunciar. Hemos estado discutiendo unos planes para llevarlos a cabo, para que haya una mayor cantidad de agentes trabajando estos casos en específico".

Cuando se le preguntó si la organización de estas actividades en que conductores de "four tracks" salen a la calle en masa se debe a una estrategia dirigida a que la Policía se intimide y no intervenga con ellos, indicó que solo son especulaciones.

Los proyectos que el gobernador García Padilla convirtió en ley el 11 de noviembre, aparte de facultar a la Policía a confiscar estos vehículos, define claramente estos transportes, proscribe su uso en carreteras pavimentadas y ordena crear un registro actualizado de todos los vehículos de este tipo que se vendan en Puerto Rico, para los que se emitirá una identificación exclusiva.

Los dueños de vehículos todoterreno tendrán un periodo de amnistía de 60 días para inscribir los mismos en el Departamento de Transportación y Obras Públicas.

Quienes incumplan con la orden de registrarlos se exponen a la confiscación de los mismos, y una multa de $500. Esto también aplica a vehículos que no tengan el número de identificación visible o vigente.

Asimismo, toda persona que utilice un vehículo todoterreno sin el equipo de seguridad podría ser sancionada con una multa de $250.

La edad mínima para viajar en estos vehículo será de 16 años.