Bruselas. La opinión pública belga vive una polémica después de que el Tribunal Correccional de Lovaina, en el este del país, haya declarado culpable por violación a un estudiante de medicina, pero no le haya impuesto ninguna pena para no comprometer su prometedor futuro como ginecólogo.

La agresión se produjo el 8 de noviembre de 2023, cuando una joven asistió con amigas a una fiesta de Halloween en el bar estudiantil Recup de Lovaina y acabó tan ebria que no podía mantenerse en pie.

El acusado, de 24 años, natural de Amberes e identificado con las siglas R.V., se ofreció para acompañarla hasta su residencia pero ambos terminaron en casa del joven, donde la violó, según el tribunal, que reconoció que la víctima “no estaba en condiciones de dar su consentimiento” y calificó el delito de “grave e inaceptable”.

Según declaró el joven a la policía cuando fue interrogado, ambos se besaron varias veces, tanto durante el trayecto como en la habitación donde mantuvieron relaciones sexuales, que duraron “entre cinco y diez minutos”.

La víctima declaró que sólo recordaba haberse despertado por la mañana desnuda en la cama junto al acusado, también desnudo y al día siguiente acudió a un centro de atención a víctimas de violencia sexual.

La Fiscalía señaló durante el juicio que el varón “se aprovechó” del “estado de embriaguez” de la chica “para satisfacer su deseo sexual” y pidió tres años de prisión con suspensión condicional.

Pero el juez, pese a reconocerle culpable, decretó una suspensión de la pena contra el agresor, aludiendo a su juventud, la ausencia de antecedentes y un futuro profesional prometedor como ginecólogo, atendiendo así a la solicitud del acusado, que sólo fue condenado por lo civil a indemnizar a su víctima por daños y perjuicios con 3,800 euros.

“Los documentos del expediente muestran que el acusado es un joven talentoso y comprometido, apreciado tanto a nivel personal como profesional. El tribunal considera adecuado suspender la imposición de la pena para que tome conciencia de su responsabilidad y prevenir una reincidencia, sin excluirlo socialmente”, señaló la corte.

No obstante, si el condenado volviera a cometer un delito en los próximos cinco años se le aplicaría también la pena suspendida por violación, por la que sólo ha sido sentenciado sin pena efectiva.

La víctima suspiró aliviada al conocer la sentencia, según el relato de los medios locales, porque “se ha establecido que no prestó consentimiento para mantener relaciones sexuales”, declaró su abogada, Sanne De Clerck, que no recurrirá la sentencia pese a que tampoco se le concedió la orden de alejamiento que reclamaba.

“Está satisfecha de que el tribunal le diera la razón y que se haya dictado una sentencia de culpabilidad. También era importante para ella que la otra parte entendiera su responsabilidad. En ningún momento quiso castigar al acusado ni arruinarle el futuro”, agregó la letrada.

El hospital universitario UZ Leuven donde se forma el condenado, por su parte, ha decidido suspender temporalmente al estudiante.