Johannesburgo. El Gobierno de Sudáfrica anunció hoy que reanudará la inmunización con la vacuna contra la covid-19 de la farmacéutica Johnson & Johnson (J&J), pausada desde el pasado 13 de abril, porque la probabilidad de desarrollar coágulos es baja.

“Es mucho mejor vacunarse que evitarlo por el miedo a tener un coágulo sanguíneo. De hecho, hay muchos más casos de coágulos relacionados con el coronavirus en sí que la posibilidad entre un millón de tener un coágulo con la vacuna de J&J”, señaló este lunes el ministro de Sanidad, Zweli Mkhize, en un comunicado.

La administración de los fármacos anticovid se retomará el día 28, pero se hará informando previamente a los vacunados de los potenciales riesgos y con medidas adicionales de vigilancia.

Sudáfrica también está creando un fondo estatal para compensar a cualquiera que desarrolle efectos secundarios relevantes por culpa de las vacunas.

“Recordemos que J&J es actualmente la mejor vacuna contra la variante 501Y.V2, que es la dominante en este país. La vacuna de Johnson & Johnson es efectiva, fácil de usar y aún se considera que es más seguro vacunarse que no vacunarse”, recalcó Mkhize.

La vacunación en Sudáfrica se pausó el 13 de abril, justo después de que las autoridades sanitarias estadounidenses hicieran lo propio en su país tras haberse detectado seis casos de coágulos graves (ahora ya 8) entre los casi siete millones de personas a los que se había administrado hasta entonces allí esta vacuna monodosis.

Las evaluaciones posteriores indicaron que hay “una posibilidad entre un millón” de desarrollar coágulos, con especial riesgo para mujeres entre los 18 y 48 años.

Con esos datos, a nivel mundial la recomendación ha sido seguir aplicándola, según recalcaron hoy las autoridades sudafricanas.

Sudáfrica depende mayoritariamente de Johnson & Johnson

La vacuna de compañía belga Janssen, filial de la multinacional estadounidense J&J, es por el momento la única de la que dispone Sudáfrica, ya que la propuesta de AstraZeneca fue desestimada en febrero pasado por el Gobierno por su baja eficacia contra la variante 501Y.V2 (descubierta en la nación austral africana el pasado diciembre, y más contagiosa y resistente a las vacunas).

Hasta la fecha, Sudáfrica, que es el país de África más golpeado por la pandemia, tan solo ha vacunado a 292,623 personas.

Todas ellas son trabajadores del sector de la salud embarcados en un estudio especial de acceso temprano, denominado protocolo Sisonke y realizado con medio millón de dosis de J&J que esta compañía cedió gratuitamente al país tras el descarte de AstraZeneca.

En su comunicado de hoy, el ministro de Sanidad sudafricano explicó que el primer 1,1 millón de vacunas comerciales de J&J (es decir, que se aplicarán de forma general, no dentro del estudio) está listo por fin para ser distribuido desde la planta de la farmacéutica sudafricana Aspen (ubicada en el sureste del país) con la que la multinacional tiene un convenio de fabricación.

Asimismo, Mkhize detalló que el primer lote de las vacunas de Pfizer compradas por el Gobierno llegará al país en la primera mitad de mayo.

Con todo esto, Sudáfrica, que va muy retrasada con la vacunación pese a ser la nación más desarrollada del continente, espera poder por fin acelerar la inoculación, que mayoritariamente se hará con J&J.

Hasta la fecha, la nación austral registró 1.575.471 casos de covid-19, con 54.148 muertes.