Sevilla, España (EFE).- La "Madrugá" de la Semana Santa de Sevilla se ha desarrollado con cientos de miles de personas en las calles, con frío y sin ningún incidente destacable.

Una de las novedades de este año era la procesión de Jesús del Gran Poder con la llamada túnica de cardos, totalmente bordada en hilo dorado, que no empleaba desde hace 60 años, lo que según algunos sevillanos hacía más impresionante la imagen pero, según otros, le restaba el andar característico del "Señor de Sevilla".

Después de un Miércoles y Jueves Santo deslucidos por la lluvia, cientos de miles de personas se congregaron en las calles sevillanas, con el contraste entre las cofradías "serias" como El Silencio o El Calvario, y las "populares", como las Esperanzas de Triana y Macarena, que recorren las calles de sus barrios bajo lluvias de pétalos, con sus pasos mecidos al ritmo de la música y gritos de "guapa, guapa".

La hermandad de la Macarena, en el barrio del mismo nombre, fue la primera en salir al poner su paso del Cristo de la Sentencia en la calle a las 12:30 horas en punto, con la presencia del alcalde de Sevilla en el balcón de la casa de la hermandad.

La salida del paso, recibido a los sones de una saeta, se vio ralentizada por la presencia de numerosas cámaras de televisión que captaban el momento.

La Esperanza de Triana tuvo una salida espectacular por la estrecha calle Pureza, donde se apagaron todas las luces mientras una lluvia de pétalos caía sobre el paso de la Virgen desde los balcones.

Como contraste, El Silencio recorrió las calles sevillanas en medio de una respetuosa quietud, sólo rota por el arrastre de las alpargatas de los costaleros en el suelo.

El paso por la Carrera Oficial registraba a las 7:00 de la madrugada ) un retraso acumulado de una hora entre la hermandad de la Macarena y la cofradía que le sigue, El Calvario.

Quienes no viven la "Madrugá" de noche tienen la posibilidad de presenciar a mediodía la entrada de las hermandades en sus templos, especialmente emotiva en los casos de Los Gitanos y las dos Esperanzas.

Un portavoz del Centro de Coordinación Operativa del Ayuntamiento sevillano (CECOP) informó a Efe de que durante la "Madrugá" no se registró ningún incidente destacable.

Entre los miles de visitantes foráneos, asistieron a la salida de la Macarena la viuda y tres hijos de Isaías Carrasco, el ex edil socialista asesinado por la organización terrorista ETA el pasado 7 de marzo en Mondragón (norte), y posteriormente sus dos hijas presenciaron el paso de las hermandades de la "Madrugá" desde el palco del Ayuntamiento en la plaza de San Francisco.

Además, en el palco de la Plaza de San Francisco también estuvieron presentes el embajador de Alemania en España, numerosos cónsules y el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza, informó el ayuntamiento.