Funcionarios de la policía filipina dijeron el jueves que están verificando informes de que un estadounidense murió tras recibir dos disparos mientras se resistía a ser secuestrado el 17 de octubre por parte de hombres armados en el sur del país.

Elliot Onil Eastman, de 26 años, originario de Vermont, recibió dos disparos con un fusil M16 mientras se defendía de sus cuatro secuestradores, quienes se hicieron pasar policías, en la localidad costera de Sibuco, informó la policía.

Los secuestradores lo arrastraron hasta una lancha motora y se alejaron a toda velocidad, de acuerdo con los informes policiales.

Una extensa búsqueda de Eastman y sus secuestradores condujo a la detención de varios sospechosos, pero él no ha sido encontrado. Tres sospechosos fueron abatidos en un enfrentamiento armado con la policía el mes pasado.

Relacionadas

El portavoz de la policía regional, teniente coronel Ramoncelio Sawan, dijo que los investigadores recibieron información de un familiar de uno de los sospechosos de que Eastman murió debido a heridas de bala en el muslo y el abdomen.

Los secuestradores decidieron arrojar su cuerpo al mar después de que murió, dijo el familiar. La información sobre la muerte de Eastman fue posteriormente corroborada por un sospechoso clave en el secuestro que fue arrestado recientemente, y su declaración jurada ha sido presentada a los fiscales, dijo Sawan.

Se han presentado denuncias penales por secuestro contra varios sospechosos, afirmó.

Estamos obligados a creer que ha muerto. Toda la información que tenemos apunta a eso”, dijo Sawan. Pero añadió que sin el cuerpo de la víctima, “todavía dejamos un poco de esperanza de que no sea el caso” y la policía continuará con su investigación.

La policía ha informado a la esposa de Eastman, quien es filipina, y a la embajada de Estados Unidos en Manila sobre el reporte de muerte, dijo Sawan.

La embajada dijo que está al tanto del informe policial y está coordinando con las autoridades filipinas, pero no hizo más comentarios debido a cuestiones de privacidad.

Eastman iba a asistir a la graduación de su esposa cuando fue secuestrado. Estuvo publicando videos en Facebook de su vida en Sibuco, una localidad costera pobre y remota, donde los sospechosos lo ubicaron, según la policía.

Dijeron que los sospechosos parecían ser criminales comunes que no pertenecían a ningún grupo rebelde musulmán que haya sido acusado de secuestros en el pasado.

Los problemas de seguridad han acosado durante mucho tiempo al sur de Filipinas, país de minoría musulmana y mayoría católica.

Un acuerdo de paz de 2014 entre el gobierno y el Frente Moro de Liberación Islámica, el más grande de varios grupos separatistas musulmanes, ha aliviado considerablemente los combates generalizados en el sur. Ofensivas militares implacables han debilitado a grupos armados más pequeños como Abu Sayyaf, reduciendo los secuestros, los atentados y otras violencias.

Abu Sayyaf ha tenido como objetivo a estadounidenses y otros turistas y misioneros occidentales, la mayoría de los cuales fueron liberados después de que se pagaron rescates. Algunos fueron asesinados, incluido el estadounidense Guillermo Sobero, quien fue decapitado en la isla sureña de Basilan, y un misionero estadounidense, Martin Burnham, quien fue asesinado mientras el Ejército filipino intentaban rescatarlo a él y a su esposa, Gracia Burnham, en 2002 en una selva cerca de Sibuco.