El miércoles, 5 de junio, un Boeing 700-300ER con casi 400 pasajeros abordo tenía que partir desde Toronto hacia París. Se supone que iba a ser un vuelo de siete horas, pero el avión tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia pocos minutos de haber despegado.

El aeroplano había volado tan solo 3,300 pies cuando los pilotos pidieron volver de inmediato. El suceso fue grabado por personas que se encontraban cerca y las imágenes permitieron ver el momento en el que el motor se incendió y destelló fuego en varias ocasiones.

El Boeing 777 encargado del vuelo AC872 fue conducido de regreso al Aeropuerto Internacional Toronto Pearson y aterrizó 50 minutos más tarde en la misma pista. Fue recibido por camiones de bomberos para atender a la explosión que ocurrió, de acuerdo con la información del medio local ‘CP24′.

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Por ahora, la aerolínea confirmó el incidente y dijo que el avión sería puesto fuera de servicio para ser evaluado por profesionales. No se ha confirmado cuál fue el origen y causas de la explosión, pero expertos en aviación suponen que podría haber sido una pérdida del compresor.

“Hace referencia a la interrupción del flujo de aire normal a través del motor a reacción. Cuando los álabes del compresor entran en pérdida, el aire que normalmente se ve forzado a ir hacia atrás no puede seguir su camino adelante. A veces puede crear una explosión y hacer que el aire escape hacia adelante y atrás de forma simultánea”, escribió sobre ese fenómeno el piloto y experto en aviación civil Manuel Represa Suevos en su blog ‘El vuelo de la Gran Avutarda’

El aeropuerto confirmó que el vuelo había despegado alrededor de las 8:45 de la noche y volvió casi una hora después, sobre las 9:50. Los pasajeros continuaron su viaje hacia París en otro avión.

Otros accidentes de aviones Boeing

Boeing es una empresa estadounidense que desarrolla, fabrica y vende aviones comerciales, productos de defensa y sistemas espaciales a clientes en más de 150 países. Últimamente, han recibido críticas por los numerosos accidentes y fallas que se han presentado en sus naves.

El 5 de enero, de 2024, salió volando la puerta de un Boeing 737 MAX 9 que se dirigía a California. Días después, el 13, un Boeing 737-800 hizo un aterrizaje de emergencia después de que la tripulación viera grietas en las ventanas. El 20, un Boeing 757 perdió la llanta delantera antes de partir.

El 4 de marzo, del mismo año, se presentó otro aterrizaje de emergencia de un Boeing 737 cuando uno de sus motores explotó en llamas, en Texas. A los tres días, se cayó uno de los trenes de aterrizaje de un Boeing 777-20 que se iba desde San Francisco hasta Japón. Se desvió hacia Los Ángeles.

El 9 de mayo, un avión Boeing 737-300 se salió de una pista en Senegal e hirió al menos a 10 personas, cuatro de ellas de gravedad. De acuerdo con la ‘BBC’, la empresa se enfrentará a una investigación penal sobre ese incidente.

Cada vez, surgen más preguntas y quejas sobre la seguridad de los aviones Boeing.