Naciones Unidas. El primer ministro de San Vicente y las Granadinas llamó el lunes a la comunidad internacional a ayudar con la recuperación de su país tras la erupción volcánica que desplazó a unas 20,000 personas.

“En toda nuestra tierra, los rostros de hombres y mujeres están acongojados y ansiosos. Están sufriendo enormemente”, dijo el primer ministro Ralph Gonsalves al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, asegurando que su país enfrenta “un desafío monumental de ayuda humanitaria”.

La Soufriere, el volcán en la isla caribeña de San Vicente, registró su primera gran exhalación de cenizas y gas el 9 de abril, un día después de que el gobierno ordenó el desalojo de residencias aledañas al volcán. Desde entonces se han registrado varias explosiones.

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Miles de personas han estado viviendo en albergues instalados por el gobierno, algunos de los cuales han pasado problemas para brindar suministros básicos, y los sistemas de suministro de agua se encuentran cerrados en varias partes de la isla.

El coordinador residente de Naciones Unidas para Barbados y el Caribe Oriental señaló la semana pasada que la isla enfrentaba “una crisis humanitaria que va en aumento y podría continuar por varias semanas y meses”. El desastre ocurrió en momentos en que San Vicente y las Granadinas lidia con la pandemia del coronavirus y se alista para la próxima temporada de huracanes.

Un barco de la armada venezolana entregó agua y otros suministros a San Vicente, y otras naciones del Caribe han enviado ayuda. Naciones Unidas liberó 1 millón de dólares de un fondo de respuesta para emergencias, según la oficina del secretario general de la ONU Antonio Guterres, y el organismo hará a la brevedad un llamado de emergencia para recaudar fondos para financiar las labores humanitarias y la primera fase de recuperación para los próximos seis meses.

Durante una reunión virtual del Consejo de Seguridad sobre organizaciones regionales, Gonsalves elogió al consejo y a la ONU por la ayuda recibida hasta el momento, pero dijo que se requiere de mucha más asistencia.

“Sin la efectiva cooperación entre nuestro país, las Naciones Unidas y nuestras organizaciones regionales y subregionales, nuestra vida y nuestros medios de subsistencia serán totalmente insoportables”, declaró, e instó a la comunidad internacional a ser generosos.

“Por favor ayuden a San Vicente y las Granadinas en esta hora cero”, puntualizó.