SANTIAGO, Chile — Un hospital chileno retuvo a una beba recién nacida y prohibió a su madre alimentarla porque fumó un cigarrillo de marihuana una semana antes que naciera: la niña sólo siente el calor de su mamá dos horas y media al día, dijo la abogada Francia Flores.

Las autoridades alegan que sólo postergaron la lactancia de la bebé, nacida el 19 de noviembre, porque los exámenes de la madre "arrojaron situaciones que ponen en riesgo su salud", según la doctora Patricia Sánchez, directora subrogante del hospital Las Higueras, en Talcahuano, distante 500 kilómetros al sur de Santiago.

El hospital denunció a Sindy Ortiz, quien en pleno trabajo de parto y al ser consultada si consumía drogas, admitió que cinco días antes fumó un cigarrillo de marihuana para aliviar el dolor de una mano, fracturada meses antes. Las consultas a los pacientes antes de una intervención quirúrgica son normales.

"No fue consumo recreacional, sino estrictamente medicinal", afirmó Ortiz.

Su defensora, la abogada Flores, dijo a The Associated Press que "aquí hay un prejuicio, una discriminación, una aplicación mecánica (de la ley), es apretar botones, no fijarse en el bien superior del niño... terminan generando un daño cierto".

"El daño que provoca la separación e impedir la lactancia es un daño que está científicamente comprobado, que es seguro, permanente y a largo plazo", enfatizó.

El tribunal verá el caso el 3 de diciembre.

En Chile durante el primer gobierno de la presidenta Michelle Bachelet la marihuana fue clasificada entre las llamadas drogas duras, aunque su consumo terapéutico está permitido bajo prescripción médica.

Flores critica que las consultas a la madre se hicieran durante el trabajo de parto. "Le hacen firmar un documento (para permitir un examen) también en trabajo de parto. Hay violencia obstétrica", opinó.

Agregó que ni siquiera a las reclusas de las cárceles las separan de sus hijos "siendo que ellas son poli consumidoras".

Ortiz pidió al tribunal que entregue a la niña a su abuela materna, peor no puede hacerlo hasta que el hospital le dé el alta, y el hospital dice que no actuará hasta que resuelva la parte judicial. Este verdadero círculo vicioso mantendrá a la beba separada al menos dos semanas de su familia.

"Está en una cama básica de neonatología. No es una niña que esté grave, está en observación y en estudio", dijo la doctora Sánchez.

"El examen nos arroja situaciones que ponen en riesgo el bienestar del menor, lo cual nos obliga por ley a nosotros y al programa Chile crece a informar a tribunales. De ahí para adelante la cosa no es de resorte nuestro sino del tribunal", añadió.

La literatura médica difiere en cuanto a los efectos de la marihuana en los bebés, hay quienes afirman que dañará su desarrollo y otros que no lo hará. Sí parecen coincidir en que en uso esporádico, bastaría suspender la lactancia por 24 horas y luego reanudar.

Flores contó que son varios los abogados que han ofrecido su ayuda gratuita a los padres de la niña y uno de ellos ya analiza una presentar una queja ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

El caso ha sido vastamente tratado en las redes sociales y la mayoría de las opiniones critican el accionar del hospital.

El mismo hospital Las Higueras mantiene un acuerdo con Fundación Daya, que busca terapias alternativas al dolor, y el laboratorio farmacéutico Knop para analizar el uso terapéutico de la marihuana, con productos que se obtendrán de una plantación inicial de 425 plantas de marihuana en Santiago y de otras 6.900 semillas plantadas este mes en el sur.