Pareja admite torturar a niña de 13 años por comer chocolate sin permiso
La menor murió tras ser trasladada al hospital con múltiples heridas.
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Islamabad. La Policía de Pakistán arrestó a una pareja que admitió haber torturado a su asistenta del hogar, una niña de 13 años, por haber robado y comido chocolate sin su permiso, y que murió a causa de las heridas sufridas, informaron este martes fuentes oficiales.
“La mujer ha admitido que la torturó por robar y comer una chocolatina”, dijo a EFE el agente de policía a cargo del caso, Zahid Iqbal.
La menor fue trasladada al hospital el martes de la semana pasada con múltiples heridas y falleció al día siguiente.
“Su cuerpo tenía múltiples marcas de tortura pero aún estamos esperando un informe detallado de la autopsia para determinar si tenía algún hueso roto”, dijo Iqbal.
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Ese mismo miércoles se realizaron los arrestos de la pareja, para quienes la menor había trabajado los dos últimos años como empleada doméstica.
Según el policía, la pareja tiene ocho hijos y actualmente están investigando a todos los miembros de la familia por su posible participación en el delito.
Las autoridades también detuvieron a un profesor de Corán que trabajaba para la familia, quien fue el responsable de llevar a la menor al hospital.
El caso ha provocado una gran indignación en este país de 240 millones de habitantes, que exige justicia para la chica. El asunto ha vuelto a suscitar el debate sobre el trabajo infantil y el maltrato a las trabajadoras domésticas.
Según la legislación del país los menores de 15 años no pueden ser empleados como trabajadores domésticos en la provincia oriental de Punjab, donde tuvo lugar el suceso.
Los padres de la menor, que residen en un pueblo de Punjab, la enviaron a trabajar cuando tenía solo ocho años. Hace dos años empezó a trabajar para la pareja a cambio de unos 29 dólares mensuales.
“Tengo una deuda de 1.2 millones de rupias (4,000 dólares) así que dejé a mi hija trabajando como doméstica para ayudarme a pagar”, dijo a EFE el padre de la manor, Sana Ullah.
Además, dijo que querían luchar el caso en los tribunales en lugar de aceptar dinero de los presuntos asesinos como compensación conocida como “diyat” o “dinero de sangre”.
A pesar de la indignación pública, este tipo de casos que involucran a familias ricas y otras pobres suelen resolverse fuera de los tribunales. En el pasado se ha visto a varios herederos perdonar a los asesinos de sus seres queridos a cambio de dinero.