Países árabes e islámicos condenan enérgicamente la quema del Corán en Suecia
Un abogado ultraderechista sueco-danés quemó el sábado un ejemplar del libro sagrado musulmán frente a la embajada de Turquía en Estocolmo.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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Gobiernos y organizaciones árabes e islámicas han condenado “enérgicamente” la quema del Corán en Suecia por un abogado ultraderechista sueco-danés, un acto que consideraron “provocación” que “propaga el odio” bajo el pretexto de la libertad de expresión.
“Permitir que esos delincuentes repitan esas provocaciones bajo el lema de la libertad de expresión, aunque sea con el silencio, es una forma de complicidad paria que obstaculiza la paz, el diálogo interreligioso y la comunicación entre Oriente y Occidente”, dijo hoy Al Azhar, la institución más prestigiosa del islám suní.
En un comunicado, Al Azhar consideró que “los frutos de esas acciones no son menos peligrosos que los atentados terroristas” para la relación entre Oriente y Occidente, e instó a que “se ponga fin al caos del término ´libertad de expresión´, su explotación en el mercado político y electoral, y su mal uso con respecto a la provocación de los musulmanes”.
El ultra Rasmus Paludan, un abogado danés que también tiene nacionalidad sueca, quemó el sábado un ejemplar del libro sagrado musulmán frente a la embajada de Turquía en Estocolmo, donde también exhibió un dibujo que ironizaba con la sexualidad del profeta Mahoma.
“Es una muestra más del alarmante nivel al que han llegado la islamofobia, el odio, la intolerancia y la xenofobia”, dijo la Organización de la Cooperación Islámica (OCI), con sede en Arabia Saudí e integrada por 57 países, en un comunicado.
La nota instó al Gobierno sueco a “tomar las medidas necesarias contra los autores de ese crimen de odio”, y a la comunidad internacional a “intensificar los esfuerzos en la lucha contra la islamofobia”.
Una postura similar manifestó la Liga Árabe en otro comunicado, en el que su secretario general, Ahmed Abulgeit, exigió en nombre de los 22 países miembros del organismo que “esos actos sean condenados por todo el mundo en Suecia”, y destacó que “la libertad de expresión no debe ser un pretexto para que los extremistas enciendan el fuego de odio entre seguidores de diferentes religiones”.
Numerosos gobiernos de países árabes e islámicos manifestaron posturas similares, incluidos los de Arabia Saudí, Catar, Emiratos Árabes, Egipto, entre otros.
Paludan, que defendió durante el acto su derecho a la libertad de expresión, se convirtió hace unos años en un fenómeno en redes sociales en Dinamarca por sus polémicas quemas del Corán en barrios de inmigrantes, y su partido, Rumbo Firme, se quedó a décimas de entrar en el Parlamento en las legislativas de 2019.
Tras varias penas menores por delitos de racismo y una prohibición de las autoridades electorales danesas por manipular declaraciones de votantes, Paludan probó suerte en Suecia, donde ha protagonizado actos similares, que originaron disturbios la pasada Semana Santa.