Ciudad de México. La periodista y exaspirante a la presidencia de Nicaragua, Cristiana Chamorro, fue declarada culpable el viernes de supuesto lavado de dinero y otros delitos tras un juicio que se prolongó durante siete días, informó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).

Chamorro, de 68 años e hija de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro (1990-1997), guarda arresto domiciliario desde el 2 de junio de 2021. Estaba considerada como la favorita para desafiar al presidente Daniel Ortega en los comicios del pasado noviembre, en los que el mandatario fue reelegido para un cuarto mandato tras encarcelar a otros seis aspirantes al puesto.

Junto a Cristiana Chamorro fueron encontrados culpables su hermano Pedro Joaquín y tres antiguos empleados de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH), que la periodista dirigió hasta enero de 2021, dijo la abogada Vilma Núñez, presidenta del CENIDH, a The Associated Press.

Se espera que las condenas sean notificadas por el juez en los próximos días. El maratónico juicio comenzó el 4 de marzo.

Las audiencias transcurrieron en las instalaciones de la cárcel policial de “El Chipote”, donde desde mediados de 2021 permanecen recluidos los cuatro detenidos, a excepción de Cristiana Chamorro. Durante el juicio, la Fiscalía presentó más de 30 testigos, de los cuales una veintena eran agentes de la policía, según reveló la defensa.

“Después de 7 días de tortura en El Chipote, el espurio Poder Judicial declaró culpables a exdirectivos y extrabajadores de la Fundación Violeta por delitos que no han cometido. Exigimos que los liberen de inmediato. #SonInocentes #SonJuiciosNulos”, tuiteó el CENIDH.

Los delitos imputados a Cristiana Chamorro son lavado de dinero, bienes y activos; apropiación y retención indebida; gestión abusiva y falsedad ideológica. El gobierno de Daniel Ortega argumenta que realizó “transacciones irregulares” desde la FVBCH con fondos de gobiernos y organismos internacionales.

La Fundación Chamorro, que cesó sus operaciones en enero de 2021, se dedicaba a promover cursos de capacitación para periodistas y financiar a medios de comunicación y proyectos de defensa de la libertad de expresión. La familia Chamorro también es propietaria del diario La Prensa, que fue clausurado por el gobierno el agosto pasado y sigue bajo ocupación policial.

Este proceso forma parte de una serie de juicios que comenzaron el 1 de febrero contra unos 46 opositores encarcelados desde hace más de ocho meses.

Otro hermano de la opositora, el también periodista Carlos Fernando Chamorro, fue acusado por los mismos delitos dentro de la causa contra la FVBCH, pero no pudieron arrestarlo porque se exilió. Los tres hermanos han asumido una posición crítica contra Ortega, en especial tras la represión del gobierno a las protestas sociales que estallaron en 2018.